En momentos en que se realizaba el habitual recuento de internos dentro de la Unidad Penal, un celador que se dirigió hacia una de las celdas del pabellón 6 Sur advirtió que algo no andaba bien. Es que cuando fue a llamar al preso que se aloja allí, este no dio señales de vida, situación que determinó que el personal penitenciario ingrese a dicha celda.
Tras entrar los agentes notaron que el preso no se encontraba y que sobre la cama había un montón de bolsas tapadas con frazadas simulando ser un muñeco.
Ante tal situación se dio aviso al resto de la Seguridad del penal para que llegue hasta el pabellón y así trate de ubicar al interno que no se encontraba desaparecido. Minutos después fue encontrado en la celda de otro convicto.
Lo que es peor
A raíz de dicho hallazgo, las autoridades del penal ordenaron que se haga una requisa en todo el pabellón. Fue así, que al inspeccionar otra celda en la mañana de este miércoles, personal de Requisa procedió al secuestro de 6 proyectiles de un arma de fuego calibre 9 mm y varios elementos, que se presume, podrían haberse utilizado para una posible fuga.
Fuente: unoentrerios.com
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