Pericias psiquiátricas indican que Nahir Galarza tiene “disregulación emocional”
La joven imputada por el asesinato de Fernando Pastorizzo tiene, según las pericias psiquiátricas, una «baja tolerancia a la frustración». Permanecerá 12 días más con prisión preventiva.
Después del informe final de la autopsia y el resultado de las pericias balísticas, se conoció ahora el resultado de las pericias psiquiátricas de la joven. Si bien en principio Nahir Galarza se había negado a hablar con el psiquiatra Simon Ghiglione finalmente se entrevistó con él tres veces a principios de febrero en las dependencias del Juzgado Penal de Menores y Familia de la Ciudad de Gualeguaychú.
A raíz de esos encuentros el profesional elaboró un informe que tenía como principal objetivo esclarecer la condición psicológica de la imputada y averiguar si comprende la gravedad de los hechos que la involucran.
La pericia concluyó que la joven acusada de matar a su novio tiene una «baja tolerancia a la frustración» y se mencionan signos de «irritabilidad». Se destaca que Nahir Galarza es «consciente de sus actos», lo que la declararía imputable por entender la criminalidad de sus actos y que tiene una «disregulación emocional» como rasgo característico de su personalidad. Es decir que tiene «control pobre sobre su propia expresión afectiva en distintas situaciones sociales».
Además, se menciona una «ausencia de estrés postraumático tras el hecho»que la familia Pastorizzo ya había mencionado por la tranquilidad con la que se ve a Nahir caminando hacia su casa en los videos de las cámaras de seguridad de Gualeguaychú minutos después de dejar a Fernando Pastorizzo agonizando junto a su moto.
Excepto en la «disregulación emocional» los resultados de este informe contrastan con el perfil psicológico que elaboraron los peritos de parte de Nahir. En esa oportunidad los profesionales concluyeron que la joven «no se haría daño a sí misma ni a terceros» y que «intelectualmente es brillante» aunque «emocionalmente terminó siendo víctima de violencia de género».
En los últimos resultados, el psiquiatra Gighlione dijo que la joven no atravesó una «reexperimentación del trauma» durante las entrevistas y no revivió emocionalmente el momento del crimen que cometió con el arma reglamentaria de su papá policía.
Según las pericias balísticas, Nahir efectuó el primer disparo en la espalda de Fernando y a quemarropa es decir, a una muy corta distancia, y el segundo desde un ángulo oblicuo, que impactó en el medio del pecho y le comprometió el esófago. A pesar de que a mediados de enero Nahir había declarado que los disparos fueron accidentales, para la defensa el informe «confirma que es casi nula la posibilidad de un disparo accidental».
A Nahir Galarza le fue recetado además clonazepam por sus problemas para dormir desde que está detenida. En cuanto a su alimentación, la joven sigue comiendo únicamente la comida casera que le lleva su madre, Yaminah Kroh.
Además, en el informe también se menciona una «cierta ideación de tinte obsesivo» relacionada a tener las manos sucias que la lleva a lavarse las manos en reiteradas oportunidades, sin llegar a ser un Trastorno Obsesivo Compulsivo.
Para Ghiglione, Nahir no tiene ningún problema de atención, memoria, conciencia, pensamiento, juicio, entendimiento, inteligencia, voluntad o apetito aunque sí presenta alteraciones en la afectividad y el sueño.
Debido a que José Ostalaza debe someterse a una intervención quirúrgica que le impedía estar presente para la audiencia de revisión de la prisión preventiva, la defensa recibió aprobación de la fiscalía y las querellas en su pedido de que a a partir del domingo 4 (fecha en que finalizan con los 60 días iniciales) se prorrogue por 12 días la prisión preventiva. Se trata de una anticipación de la defensa de Nahir, para evitar que la prórroga fuera mayor y para volver a intentar la excarcelación.