El derrumbe del valor del peso frente al dólar fue ayer el factor alcista excluyente para los precios de las materias primas exportables, entre ellas la soja.
La devaluación impulsó una mejora local del precio
La devaluación impulsó una mejora local del precio

 En efecto, la demanda ofreció en forma abierta 9600 pesos por tonelada de la oleaginosa para las entregas sobre el Gran Rosario, $300 más que en la jornada precedente.

«Por lotes importantes algunos compradores elevaron la propuesta a 9800 pesos por tonelada e incluso se llegó a pagar algo más por lotes grandes», contó a LA NACIONuna fuente del sector comercial. Añadió que durante la rueda se comercializaron unas 70.000 toneladas de soja.

Según el tipo de cambio comprador (cotización divisa) del Banco Nación, ayer el peso se depreció un 4,32% frente al dólar, al pasar la paridad entre ambas monedas de 40,55 a 42,30. Esta variación en el mercado cambiario no solo mejoró la capacidad de pago en pesos de los exportadores, sino que también redujo el impacto de los derechos de exportación impuestos en septiembre pasado, de $4 por tonelada despachada (la soja y sus subproductos, además, tributan un 18 por ciento fijo).

Por soja de la nueva cosecha, con entrega en mayo sobre el Gran Rosario, los compradores volvieron a ofrecer 225 dólares por tonelada.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) las posiciones mayo y julio de la soja sumaron ayer US$1,50 y 0,90, mientras que sus ajustes fueron de 233 y de 239,10 dólares por tonelada.

Tras las importantes bajas del miércoles, los precios de la soja registraron ayer un muy ligero repunte en la Bolsa de Chicago. Al cierre de la rueda, los contratos marzo y mayo sumaron US$0,37 y 0,18, en tanto que sus ajustes resultaron de 327,30 y de 331,61 dólares por tonelada.

Esta débil mejora se dio pese a la noticia de compras chinas de soja estadounidense por, al menos, 500.000 toneladas. Como suele suceder hasta el momento de la confirmación oficial, ayer abundaron los rumores, con operadores que elevaron el volumen adquirido por las empresas estatales de China hasta el millón de toneladas.

Sin embargo, el potencial alcista de la noticia fue contrarrestado por el negativo dato aportado por el USDA sobre las ventas externas semanales de los Estados Unidos, que apenas sumaron 311.400 toneladas, contra los 2,20 millones del reporte anterior y frente a un rango previsto por el mercado de entre 600.000 y 1.000.000 de toneladas.

Además, la apreciación del dólar frente al euro (la paridad pasó de 1,1308 a 1,1216) resultó un dato negativo para las materias primas estadounidenses, dado que les restó competitividad. Por caso, ese fue el principal factor bajista para el trigo en Chicago y en Kansas, donde la posición mayo cayó US$4,32 y 4,04 tras cerrar en 161,03 y en 157,08 dólares.

En el nivel local, las ofertas por maíz disponible crecieron ayer de 5400 a 5600 pesos para el Gran Rosario, mientras que el valor del grano de la nueva cosecha trepó de 130 a 135 dólares. «El mercado de maíz nuevo fue el más activo, con ventas por cerca de 90.000 toneladas», contó una fuente de la plaza.