Somos un pueblo que camina, anuncia y sirve
Por monseñor Jorge Eduardo Lozano, arzobispo de San Juan de Cuyo y miembro de la Comisión Episcopal de Pastoral Social
Esa es nuestra carta de identidad, podríamos decir como la vocación que tenemos en común. Pertenecer a este Pueblo de Dios, la Iglesia, es una iniciativa del Padre; Él nos llama a ser miembros de su familia desde el momento del Bautismo. Y nosotros le respondemos que sí.
La Iglesia es “de Cristo”. No del Papa, los obispos o consagrados. Todos somos Iglesia y, cada uno según su vocación, responsable de su caminar en este mundo. Por eso Francisco insiste en que “cada uno de los bautizados, cualquiera que sea su función en la Iglesia y el grado de ilustración de su fe, es un agente evangelizador, y sería inadecuado pensar en un esquema de evangelización llevado adelante por actores calificados donde el resto del pueblo fiel sea sólo receptivo de sus acciones”. (EG 120)
Por eso estamos realizando desde principios del 2018 este camino de oración y reflexión en las comunidades, movimientos, instituciones para que, con la participación de la mayor cantidad posible, logremos discernir cuáles son los desafíos que tenemos como Iglesia en San Juan, y busquemos juntos las respuestas que el Señor nos inspira.
Hubo en este camino dos instancias en las Parroquias, dos en los Decanatos en el 2018, y Asambleas Parroquiales entre febrero y marzo del 2019. Ahora, el martes 2 de abril, nos encontraremos como Asamblea Diocesana para dialogar a partir de las propuestas que han enviado, y discernir cuáles nos pueden ayudar más a la Iglesia Diocesana para vivir nuestra vocación y misión.
Una antigua expresión utilizada no sólo en el ámbito eclesial dice: “Lo que a todos concierne, debe ser tratado por todos”. La evangelización nos concierne a todos. Cuando Jesús después de la Pascua envió a los discípulos: “Vayan por todo el mundo y anuncien el Evangelio a todos los pueblos” (Mt. 28), no sólo envió a aquellos 11 Apóstoles sino en ellos a la Iglesia de todos los tiempos y lugares. También a la Iglesia en San Juan.
Estamos haciendo camino juntos. Esto se expresa con la palabra “sinodalidad”. Una mirada al libro de los Hechos de los Apóstoles nos ayudará a reconocer esta experiencia en el modo de resolver cuestiones importantes entre los primeros cristianos. Ellos se encontraron con grandes dificultades e interrogantes en el comienzo de la tarea evangelizadora. No es solamente una cuestión operativa o metodológica, sino algo que pertenece a la esencia eclesial. Como decía San Juan Crisóstomo: “Iglesia y Sínodo son sinónimos”.
Algunos compartían con alegría que los trabajos en las Parroquias habían ayudado a reconocer errores sin amarguras o discusiones estériles. A revisar la vida de oración, la experiencia comunitaria y la dimensión misionera. Qué bueno poder dar estos pasos hacia la conversión pastoral.
La Asamblea es una experiencia de comunión fraterna. No es una democracia, como si la Iglesia fuera un sistema político, sino una fraternidad al modo evangélico. Por eso, si bien tendremos momentos de votación, esos son precedidos por el diálogo sincero y por un momento importante de oración. El que nos une e impulsa es el Espíritu Santo. No una línea ideológica o un interés sectorial.
Por las condiciones del lugar y la metodología a desarrollar, podrán participar los delegados designados por las Comunidades y Movimientos. Seremos cerca de 1.000 asambleístas de diversas vocaciones (el obispo, los sacerdotes, diáconos, seminaristas, religiosos y religiosas, consagrados y laicos…) y actividades variadas.
Después del mediodía podrán acercarse quienes quieran a escuchar algunas de las conclusiones, participar de la misa final (que celebraremos cerca de las 15 hs), en el Colegio Don Bosco.
Te pido nos acompañes con tu afecto y oración. Contamos con tu participación, porque vos también sos Iglesia.
Este domingo se realizan las PASO en San Juan. Recemos para que todo transcurra con la normalidad deseada, y por los precandidatos que se postulan.
El pasado lunes 25 de marzo el Papa firmó una nueva Exhortación Apostólica titulada “Cristo vive” (en latín “Christus vivit”) que trata acerca de los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional, temática reflexionada en el Sínodo de obispos de octubre pasado. Será presentada el martes 2 de abril, aniversario de la muerte de San Juan Pablo II.
Y en toda la Argentina el 2 de abril es un día de especial recuerdo: Día de los Veteranos y Caídos en la guerra de Malvinas. Recemos por nuestros héroes argentinos, los que dejaron sus vidas en esa lucha que demostró, como toda guerra, su infecunda absurdidad.