Supermercados lanzarán descuentos para jubilados y beneficiarios sociales
Los descuentos pueden rondar entre el 10 y 15%. La Anses y los comercios trabajan en una serie de beneficios para quienes paguen con tarjeta de débito.
La Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) y los supermercados anunciarán en breve una serie de descuentos para jubilados y beneficiarios de AUH y otros planes sociales. Los descuentos variarían en cantidad y alcance en cada supermercado, pero tendrán un parámetro común: alcanzarán a todos los que paguen con una tarjeta de débito vinculada a una cuenta de la Anses, como una jubilación o una AUH.
Así, las grandes cadenas de retail preparan descuentos de entre 10 y 15 por ciento, que abarcarán a una cantidad determinada de productos. Por ejemplo, podrían alcanzar a todos los alimentos y artículos de limpieza y excluir a los artículos de bazar o electrodomésticos. Además, podrán ser permanentes o acotados a uno o más días a la semana, publicó TN.
Los supermercados afrontarán el costo del beneficio atraídos por la gran cantidad de clientela que podría volcarse a las góndolas, en momentos en que el consumo se retrae y sus ventas caen. En enero, último dato oficial disponible, las ventas en supermercados cayeron 10,5% anual en cantidades, según el Indec. Las estadísticas oficiales marcaron en enero la séptima caída interanual consecutiva a precios constantes (es decir, descontada la inflación).
Según estimaciones oficiales, la Anses paga cada mes 17 millones de haberes de distinto tipo. Ellos accederán a los descuentos al pagar con tarjeta de débito.
Para el ente previsional, la batería de descuentos ayudará a formalizar operaciones. Se estima que la mayor parte de jubilados y beneficiarios de la AUH retira el efectivo del cajero o de la sucursal bancaria y luego gasta el efectivo. Es dinero que puede pasar a la informalidad. Al bancarizar toda la operación, las ventas tributarían y los compradores se acostumbrarían a pagar con tarjetas de débito.
El programa, en algún modo, suplantará al descuento generalizado de IVA que se había instruido en 2016 para jubilados que cobraban la mínima y beneficiarios de AUH. El descuento también corría para pagos con tarjetas de débito y tenía un tope de 300 pesos, que nunca se actualizó. Finalmente, el Gobierno decidió este año no prorrogar ese programa. Según argumentaron las fuentes oficiales en ese entonces, el beneficio nunca despegó: de los 7,5 millones alcanzados, la cifra mensual de beneficiarios que efectivamente accedían al era de entre 1,2 y 1,4 millón.
El fin de semana, en una entrevista con el diario Perfil, el titular de la Anses, Emilio Basavilbaso, anticipó que el ente previsional trabaja en una serie de descuentos en comercio.
«Queremos tener un programa de descuentos para los consumos que se hagan con la tarjeta de débito gratuita que tienen con Anses. Va en línea con la bancarización que se busca y apunta a reemplazar la devolución de IVA, que no había funcionado bien», dijo Basavilbaso al matutino.
«Que el jubilado saque toda la plata y la meta en el bolsillo o abajo del colchón es un peligro, pero también atenta contra el sistema, porque es plata en blanco que se va al negro. Se suman supermercados, farmacias, electrodomésticos. Si podemos hacer que parte del 35% que va a la economía en negro esté en blanco, ya garantizamos que las cuentas cierren sin dolor alguno», agregó.
La medida podría anunciarse junto con la ampliación de los montos de los créditos Anses, también destinados a jubilados, pensionados y beneficiarios de la AUH. El Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) prestará hasta $160.000 a tasas que rondarán el 50%, más convenientes que las que ofrece un banco o una financiera por un préstamo a sola firma.
Y llega en momentos en que el Gobierno intenta paliar la caída del consumo y la pérdida del poder adquisitivo, con los precios de los alimentos subiendo a más del 5% mensual y al 58,3% anual, según el IPC del Indec de marzo.
Del lado de los supermercados, la oferta institucionalizaría algo que cada cadena ya hace por sí misma y de manera más acotada: un descuento semanal de alrededor del 10% a jubilados.
En paralelo, la secretaría de Comercio negocia con las empresas alimenticias la renovación del programa Precios Cuidados, que vence el 6 de mayo. Según fuentes del sector privado y oficiales, la idea del Ejecutivo es solucionar algunos faltantes, como el de la leche.