En su estadio, Rosario Central derrotó a Godoy Cruz por 5-2. Fue con goles de Cardona en contra, Brítez, Rius, Rinaudo y Molina; mientras que para el Tomba anotaron Arena y Badaloni. Así, el Canalla dejó en descenso directo a Patronato.

 

Este sábado por la tarde hubo un partidazo en el estadio Gigante de Arroyito. No tanto por la cantidad de goles, que también colaboró, sino que por la gran cantidad de ocasiones con las que contó cada equipo para poder abrir el tanteador.

 

Sin embargo, ya en el inicio mismo del juego llegó el primero. A los dos minutos, un centro desde la izquierda dio en la pierna de Tomás Cardona y se convirtió en el 1-0 para el anfitrión. No hubo que esperar mucho para el segundo, a los 15, un tiro de esquina cayó en el corazón del área y la pelota le quedó a Emanuel Brítez. El ex Unión remató fuerte y sin oposición para poner el 2-0 parcial.

 

Pero desde el 0-2 empezaron a mejorar los mendocinos y es por eso que llegaron al descuento. Fue luego de un excelente pase desde el centro del ataque hacia la derecha para el ingreso de Nahuel Arena, que remató fuerte y venció la débil oposición de Jeremías Ledesma.

 

No sería todo en el primer tiempo, a los 29 llegó el tercero del Canalla. Luego de un centro desde la derecha y un rechazo que fue hacia la puerta del área grande, la pelota le quedó a Ciro Rius, que remató de primera y venció a Andrés Mehring para poner el 3-1 parcial con el que se fueron al descanso.

 

En el complemento salieron más decididos por los dirigidos por Daniel Oldrá y es así que llegaron rápido al descuento. Primero lo tuvieron con un cabezazo en la salida de un tiro de esquina con respuesta de Ledesma, pero a los 15, nuevamente en un córner, llegó un centro al primer palo peinado por Santiago García y atrás apareció Tomás Badaloni para empujar y poner el 2-3.

 

Cuando parecía que el Tomba lo apretaría, llegó un planchazo de Arena en posición de ataque que le valió la segunda amonestación y la expulsión, dejando a los mendocinos con uno menos y sin fuerzas para buscar la igualdad.

 

De esto se aprovechó el local, que logró estirar el tanteador con dos goles más. Primero fue Fabián Rinaudo, que recibió una pelota en el borde de la medialuna, remató al palo derecho y venció a Mehring -de floja respuesta- para el 4-2 parcial.

 

Y el quinto llegó en la salida de un tiro de esquina. A los 42, la pelota tras el córner llegó directa a la volea de Nahuel Molina que cruzó el remate al palo derecho, el balón se filtró entre las piernas de todos sus contrincantes y estampó el 5-2 que resultaría definitivo.