El resto de los locales irán sumándose en forma paulatina a medida que presenten los protocolos de prevención y adecuen los salones.0028367138

Después de 80 días cerrados, los bares y restaurantes de la ciudad se preparaban ayer para abrir sus puertas y volver a encontrarse con sus clientes desde hoy temprano. Alrededor de la mitad de los mil locales gastronómicos habilitados ya presentaron al gobierno provincial su protocolo para arrancar su actividad en el marco de la «fase de distanciamiento», como medida preventiva para evitar nuevos contagios de coronavirus. El resto, estimaron desde la cámara que los agrupa, lo hará recién el próximo fin de semana o durante las vacaciones de invierno. La actividad se retomará con precauciones: con horarios acotados, mesas más separadas y el registro del nombre de cada uno de los comensales .

En los locales gastronómicos de Pellegrini o de Pichincha, la actividad puertas adentro era tan grande como las expectativas por la reapertura. Limpiar, acomodar mesas respetando la separación de dos metros, colocar cartelería indicando las medidas de prevención del Covid-19 o mamparas para separar algunos sectores del salón eran parte de las tareas que se desarrollaban contra reloj.

«Es un momento que estábamos esperando desde hace tiempo porque nuestra actividad resultó una de las más golpeadas por la cuarentena», recordó Carlos Mellano, presidente de la Cámara Hotelero Gastronómica de Rosario. Así, después de acordar protocolos de trabajo, «Rosario será la primera de las grandes ciudades del país en habilitar el funcionamiento de bares y restaurantes», destacó.

Lógicamente, para que esto suceda, hubo que introducir modificaciones a la rutina de trabajo. Por ejemplo, el horario de cierre no podrá extenderse más allá de las 23, los salones deberán reducir su ocupación a la mitad de lo permitido y, en el caso de los restaurantes, trabajar con reservas. Además, el personal deberá registrar a los comensales y se evitarán las mesas de más de seis personas.

Para Mellano, «son medidas que tenemos que implementar con rigurosidad y responsabilidad» para evitar contagios de coronavirus y nuevos brotes de la enfermedad que obliguen nuevamente a limitar algunas actividades.

Listos, ya

Rosario tiene habilitados alrededor de mil emprendimientos gastronómicos bajo distintos rubros: bares, restaurantes, cantinas o bares con amenización musical. Según estimó Mellano, la mitad de los locales abrirán sus puertas hoy. «Otros lo harán en el fin de semana o en las vacaciones de invierno. «Hay muchas cosas que poner en orden; aprobar protocolos, capacitar al personal. No es fácil poner en marcha un local gastronómico después de tantos días de permanecer cerrados», explicó.

Un protocolo riguroso

El secretario de Desarrollo Económico y Empleo del municipio, Sebastián Chale, destacó el proceso que llevaron adelante para desarrollar los protocolos y garantizar la seguridad de los clientes.

«Todos los requisitos los acordamos con las asociaciones empresarias, el gremio y los equipos de salud, en base a la experiencia de otras ciudades», explicó y contó que el viernes tuvieron una videoconferencia con empresarios gastronómicos de Italia para contrastar experiencias sobre la vuelta a la actividad después de la cuarentena.

«La expectativa con lo que suceda esta semana es alta, porque se trata de un sector donde las consecuencias del aislamiento obligatorio se sintieron y muchos no pudieron acceder a algunos beneficios, como los ATP, y aunque pudieron poner en marcha servicios de delivery no lograron cubrir sus costos de funcionamiento», sostuvo.

De todas formas, se mostró optimista en el comportamiento del público. «En el comercio minorista ya estamos viendo una mejora en la actividad y creemos que con los bares pasará lo mismo, la gente se va a ir acercando de a poco».

El cierre de los restaurantes no podrá superar las 23 y sólo deberá ocuparse la mitad de la capacidad

prevención. En los restaurantes marcaban ayer las mesas que no se podrán utilizar para mantener el distanciamiento social y obligatorio.

prevención. En los restaurantes marcaban ayer las mesas que no se podrán utilizar para mantener el distanciamiento social y obligatorio.