Mediante el Decreto provincial Nº 1.406, el gobernador Gustavo Bordet autorizó la reapertura de actividades gastronómicas, gimnasios y algunas actividades culturales en Paraná y su área metropolitana. EL DIARIO recorrió ayer algunos bares y restaurantes que volvieron a trabajar.
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La esperada reapertura del sector gastronómico concretada ayer logró un bajo nivel de acercamiento de clientes. En una recorrida de EL DIARIO por la zona céntrica de la ciudad durante la mañana se vio muy poca concurrencia a los bares y restaurantes, aunque sin embargo a la tarde se pudo observar una mayor cantidad de jóvenes en los locales, que ahora tienen habilitada la atención hasta las 19 horas.

Marcelo Barsuglia, vicepresidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica Paraná (AEHGP), habló con EL DIARIO y señaló que “la reapertura era una necesidad inmediata porque necesitábamos volver a trabajar” y agregó que “estas idas y vueltas con la actividad realmente complican muchísimo al sector porque todo tiene un costo adicional y acá hemos tenido muchos avances y retrocesos y nunca hubo una postura clara en cuanto a la situación de la gastronomía”, apuntó Barsuglia sobre la realidad del sector gastronómico.

“Está más que claro que los contagios no se dan acá, en lo que tenemos que poner énfasis tanto nosotros como así también las autoridades es en el control tanto en la calle, como en lugares al aire libre en donde se realizan otras actividades y no se mantienen las medidas de prevención. Hay que controlar fundamentalmente las reuniones sociales, que son el principal foco de contagio”.

Controles

Luego de ratificar los “estrictos controles” que se concretan en los locales gastronómicos, Barsuglia habló sobre “la difícil situación económica que atraviesa” la gastronomía, pero fundamentalmente el sector hotelero. “La actividad nuestra está muy golpeada, muy endeudada y lamentablemente acá no tenemos otra ayuda del Estado que no sea el ATP, que en realidad es un vaso de agua en el desierto que sirve para pagar parte de los sueldos pero lamentablemente las empresas tenemos otras deudas que se van acumulando”, detalló.

“La situación es mucho peor en los hoteles, porque están sin trabajar desde el mes de marzo cuando se prohibió la actividad turística y no vemos que en el corto plazo tengamos una reactivación”, lamentó Barsuglia, para agregar que “mientras tanto, las empresas hoteleras hace seis meses no tienen ingresos de recaudación, es todo deudas”.

Barsuglia, quien también integra la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (Fehgra), aseguró que “la situación de la hotelería es muy crítica y entra en una fase terminal, en los próximos días tendremos un montón de cierre de hoteles porque la situación no da para más”.

La capital provincial no es la excepción con respecto al resto de las ciudades del país que hoy en día se encuentran muy comprometidas con el Covid.

Consultado sobre la expectativa que hay a partir de la reapertura del sector gastronómico a partir de este lunes, el dirigente dijo que “cada vez que volvimos a trabajar llegamos a facturar el 20%, estamos con una capacidad habilitada para trabajar del 30% y no pedimos más porque no llegamos a cubrir este espacio que tenemos”.

Barsuglia cuestionó además el cierre de los locales a las 19 horas, teniendo en cuenta que “casi el 70% de los locales gastronómicos en la ciudad son nocturnos, entonces si tenemos un horario de apertura de 7 de la mañana a 7 de la tarde, en el horario que tendrían que abrir están cerrando”.