Las criptomonedas brillan como camino al dólar: conocé dónde se compran y cómo se almacenan
Después de que el Gobierno reforzó el cepo cambiario, el único camino que quedo abierto para adquirir dólares son las monedas digitales. Y por eso es importante saber dónde adquirirlas y los medios más seguros para almacenarlas.
Se estima que existen más de 900.000 ahorristas en monedas digitales en Argentina.
Las plataformas que arbitran en monedas digitales permiten realizar en monedas digitales las siguientes operaciones:
-Remesas: enviar dinero a cualquier parte del mundo
– Pagos de bienes y honorarios.
– Ahorro: Bitcoin tiene un mejor desempeño que muchas monedas.
– Cambio: de moneda local a dólar u otras divisas
– Arbitraje: comprar bitcoin barato y vender más caro.
Esto se realiza comprando divisas virtuales a usuarios de otros países, y luego vendiendo a usuarios de Argentina, que reciben pesos en cuentas bancarias o Fintech.
El Bitcoin vale u$s10.800 y se pueden adquirir fracciones, mientras que el dólar oficial oficial en Argentina cotiza a $135.
Las compras de monedas digitales no tienen costo, pero por las ventas se cobra el 1%. Así, se pude obtener que por cada dólar de Bitcoin, $125, que es un valor algo menor al blue.
Además, para evitar la fluctuación propia de la Bitcoin, la plataforma también ofrece la posibilidad de adquirir DAI (una stablecoin o divisa estable por su cotización fija) que mantiene paridad con el dólar y es muy utilizada en la Argentina, tal como informa iProUP.
Formas de adquisición
El especialista Marcos Zocaro enumera los siguientes caminos para la compra de monedas digitales:
1. Se pueden adquirir en un exchange online dedicado a la compraventa de criptomonedas.
El Exchange es un sitio online dedicado al intercambio de estos activos.
En Argentina, los más conocidos son SatoshiTango, Ripio, Buenbit, ArgenBTC y Bitex, entre otros, enumeró Zocaro. A nivel internacional destacan Binance, Coinbase y Bitstamp, añadió el experto.
La persona deposita dinero en la cuenta del exchange y allí puede comprar cryptos.
Posteriormente, también podría venderlas allí mismo.
Para fondear las cuentas en estos exchanges, en el ámbito local, se pueden realizar principalmente transferencias bancarias vía CBU o mediante billeteras digitales (CVU).
2. Se pueden comprar también en forma directa a otra persona.
Con este mecanismo, las partes acuerdan los términos del intercambio, desde precio hasta la forma de pago.
Hay dos variantes principales:
- En primer lugar, la compra denominada P2P (peer-to-peer), donde dos personas negocian y concretan la compraventa en forma directa, sin intermediarios y sin importar la ubicación de ambas partes. Así, alguien desde Buenos Aires puede comprarle bitcoins a otra persona en Salta o Tailandia, girándole dinero a su cuenta bancaria, por ejemplo.
- Y en segundo lugar, la compra F2F (face-to-face), cuando se hace la transacción en forma personal y la compra se paga en efectivo.
Al no existir ningún movimiento bancario de fondos, y las criptomonedas acreditarse directamente en la billetera del comprador, con el mecanismo F2F el anonimato de la operación puede ser total.
En la compra «directa» P2P o F2F, para encontrar a la «contraparte» compradora o vendedora existen varias opciones, desde «amigos» hasta grupos en redes sociales o páginas web que sirven para «unir a las partes»
Estos sitios (servicios de escrow), donde el ejemplo predominante es LocalBitcoin, están dedicados a «unir las partes» y brindar más seguridad al intercambio, puntualizó Zocaro.
3. Minería: como la mayoría de las criptomonedas funcionan en forma descentralizada, sin un organismo central que autoriza y controla las operaciones (como puede ser un Banco Central), esta tarea es llevada a cabo por los propios usuarios del sistema.
Los encargados de validar las operaciones son los denominados «mineros», y como recompensa, reciben criptomonedas.
Los mineros utilizan determinados hardware y software.
Existen mineros «individuales» pero también «pools» de minería (que agrupan a muchos mineros que cooperan entre sí) o empresas que conforman enormes «granjas» de minería.
4. Cobro de sueldo y/o honorarios: también se pueden cobrar sueldos u honorarios, por ejemplo, en bitcoin. O incluso cobrar cryptos por la venta de bienes.
Si bien en Argentina existen muy pocos casos de aceptación de pagos con criptomonedas, a nivel mundial es una tendencia que no deja de crecer, puntualizó Zocaro.
Cómo ahorrar en crypto
Zocaro también relató cuáles son las principales formas de almacenamiento de criptomonedas, tal como sigue:
1. Se pueden almacenar en el Exchange.
Nno es muy seguro hacerlo así, ya que si el exchange desaparece se perderá el acceso a las criptomonedas, comentó Zocaro.
2. También se puede almacenar en billeteras (o wallets), donde el titular posee el control de sus fondos.
Existen varios tipos de wallets:
- Digitales, que se administran, por ejemplo, desde el celular. Por ejemplo Coinomi.
- Físicas, desde un hardware tipo USB, como Trezor o Ledger, o simplemente en papel.
Las físicas son las más seguras, dado que son más difíciles de hackear, aseveró Zocaro.
Pero las wallet no «almacenan» criptomonedas, como por ejemplo el bitcoin, lo que sí «guardan» y administran son las llaves o claves públicas y privadas de sus usuarios.
Se puede pensar a la clave pública como el número de cuenta bancaria; mientras que la clave privada sería equivalente al PIN secreto para acceder a la cuenta bancaria, comparó Zocaro.
Por lo tanto, no debería hacerse pública, o de lo contrario, las tenencias correrían serios riesgos, alertó el experto.
El origen
En 2008, un tal Satoshi Nakamoto, cuya identidad sigue siendo un misterio hasta el día de hoy, publicó el documento Bitcoin: un sistema de dinero en efectivo electrónico peer-to-peer.
Así, inició una revolución en las finanzas con la creación de la primera criptomoneda: el bitcoin, a la que pronto le surgieron «competidores» (altcoin) en todo el mundo, como Ethereum o Ripple), señaló Zocaro.
La columna vertebral de las criptomonedas es la criptografía, de ahí su denominación como cripto.
Y la tecnología que hace realidad el sistema es la blockchain o cadena de bloques: se trata de una enorme base de datos almacenada en forma virtual y donde cada usuario del sistema tiene una copia actualizada y totalmente sincronizada en su computadora.
Hoy el valor de un bitcoin ronda los u$s10.800, pero se puede adquirir «centavos» de un bitcoin, denominados satoshis: es la mínima unidad en que se divide un bitcoin y se lo expresa como 0,00000001.
Si bien en general el precio de las criptomonedas es muy fluctuante (salvo en el caso de las denominadas stable coin, como la DAI), bitcoin es el principal ejemplo.
Durante varios años su cotización estuvo por debajo de los u$s1000, algunos años incluso cotizaba a sólo u$s1.
Sin embargo, a fines de 2017 su valor rozó los u$s20.000, y hoy disminuyó a la mitad.
Con la reforma tributaria de diciembre de 2017, se comenzó a gravar con el Impuesto a las Ganancias los beneficios derivados de la enajenación de estos activos en la Argentina, concluyó Zocaro.