El martes 24 de septiembre a las 13 horas el gobernador de la provincia, Rogelio Frigerio, dio una conferencia de prensa sobre “el salario docente” y después de ocho minutos donde argumentaba exactamente igual a sus predecesores, los esfuerzos que hace la provincia para pagar los sueldos a los trabajadores de la educación, se sinceró y en unas cuentas oraciones muy cortas expuso de manera textual lo que realmente está pasando en la provincia. Citamos:

“¿Van a estar bien los docentes con estas medidas? Sabemos que falta mucho para eso. Pero van a estar mejor que el año pasado. Lo que es mucho decir, teniendo en cuenta que el Estado provincial recibe hoy un 20% menos de recursos que en el año 2023”, aseveró.

Ahí está uno de los problemas señor gobernador, cuando usted, por ejemplo, levantó y levanta la mano para rendirle pleitesía al gobierno nacional. Enviar el mensaje a todos los entrerrianos que la provincia obedecerá todo lo que el presidente Javier Milei solicite. Que sus legisladores votaron y votan leyes en desmedro del bienestar de los entrerrianos. Que los representantes, no nos representan; al contrario, representan los intereses de unos pocos en deterioro de muchos.

¿Qué esperaba usted, señor gobernador, después de la brutal devaluación en diciembre del año pasado y con salarios en julio llegando casi a tocar la indigencia? Además, usted anuncia con total desparpajo aumentos “remunerativos” cuando lo que exige la Ley son montos “remunerativos y bonificables”.

Los trabajadores de la educación en la provincia de Entre Ríos hemos dado un mensaje de carácter, de templanza, de bronca y de lucha sobrepasando las maniobras que se tejieron en la conciliación en la instancia judicial. Los ingresos se degradan día a día, los aumentos descarados de los servicios esenciales de luz, gas, electricidad, combustibles y transporte son una trompada en nuestros rostros, la desconfianza en el gobierno y en las conducciones sindicales marcan un poco el termómetro multicausal de esta situación de angustia destructiva que vivimos hacia el interior de la escuela pública. El No rotundo, a la propuesta salarial mezquina, manifestado en las comunidades educativas fue contundente en el Congreso de AGMER resolviendo cinco días de huelga. Debemos ganar las calles masivamente y darle un fuerte contenido a las medidas, con el cuerpo, el corazón y la cabeza.

En ese marco de máxima tensión queremos aportar algunas consideraciones para capitalizar esa fortaleza, no debilitarnos y exigiendo algunos criterios respecto a la orientación de la demanda salarial.

– El no haber arribado a un acuerdo termina siendo responsabilidad de la patronal, que extendió las audiencias hasta el mayor extremo posible, es natural que el enojo de todos nosotros se haya canalizado hacia un rechazo rotundo a la propuesta salarial presentada.

– Exigir al gobierno de Frigerio que deje de ser sumiso al poder central de Milei y reclame los fondos coparticipables que nos pertenecen a las provincias. En Argentina hay plata y los trabajadores vamos a disputarla.

– Practicar en los hechos el federalismo fiscal no sólo en los debates de carácter teórico. De los impuestos, el de mayor recaudación es al consumo (IVA) que debe tener una vuelta a las provincias. Que los impuestos sean progresivos y no regresivos; es decir, que aporten más los que más tienen y no al revés como sucede hoy día.

– El gobierno tendría que mandar un gesto a los trabajadores retirando de la Legislatura el proyecto de reforma de la Ley de Jubilaciones 8732/90.

– Exigir a la conducción nacional de Ctera apoyo con plan de acción para que las provincias no queden aisladas en los reclamos.

– Nuestro norte es acceder a la Canasta Familiar Total por cargo y no caer en la pobreza.

Pongamos en detalle algunos criterios:

– Lo adeudado del primer semestre 6,55%, en un solo pago.

– El porcentaje que indica el IPC, cuyo pago se propone para el mes siguiente que se pague por Complementaria dentro del mismo mes.

– Cuando se habla del porcentaje de IPC como compensación que haría el gobierno para no perder frente a la inflación. Aquí pedimos una compensación del 3% de aumento por la pérdida del aporte jubilatorio (Decreto 1576/24) y así no terminar perdiendo frente a la suba de precios.

– Todos los montos remunerativos y bonificables para que llegue a activos, jubilados y repercuta en la carrera docente.

– La base de cálculo de los haberes al mes inmediato anterior, y no sobre salarios de enero o junio. De esta forma se va evitando el tener que esperar a la finalización del semestre para tener que cobrar un valor que se fue licuando mes a mes con la pérdida del poder adquisitivo del sueldo/jubilación que se consume a través de la suba de precios, tarifas, combustibles, alquileres, etc.

– ¿Tenemos que seguir pensando nuestro salario/jubilación en función de lo que indique el INDEC respecto a la inflación? ¿O tenemos que comenzar a romper con esa lógica de “compensaciones en función de la suba de precios” y exigir que los porcentajes sean superiores para poder aspirar a un recupero del poder adquisitivo que venimos perdiendo desde hace años?

– Los montos en negro ya no deberían formar parte de ninguna propuesta salarial, más allá de que Fonid y Conectividad se pagaban con ese criterio, teniendo en cuenta que la Constitución Provincial plantea la remuneratividad, al menos, de los incrementos salariales.

Estos son sólo algunos criterios, a los cuales se les puede agregar más, o modificarlos para que sean mejores.

Pero antes de que el gobierno provincial apueste por el “desgaste” hacia el interior de las escuelas, es necesario que se tome la iniciativa o recupere.

La lucha debe continuar, los paros se van a llevar a cabo, e incluso hay una Movilización Provincial planteada, a la que deberemos concurrir la mayor cantidad de compañeros posible. Por eso hay que aprovechar este envión y el apoyo que tenemos de gran parte de la sociedad.