Alarma en una escuela de Berazategui, por un brote de tuberculosis
Al menos 4 adolescentes tienen la enfermedad que es altamente contagiosa. Los padres denuncian que el colegio les ocultó la existencia de los casos y reclaman acciones de prevención.
Luz tiene 13 años y en apenas un mes perdió 12 kilos. Todo comenzó el 1 de mayo. «Me dijeron que tenía pulmonía, pero ella seguía bajando de peso y no le paraba la fiebre. Recién el 29 de mayo me confirmaron que era tuberculosis», cuenta Daniela, su mamá. A dos meses del contagio de la enfermedad, Luz sigue peleando por su salud. Desde hace una semana dejó de adelgazar y muy lentamente empieza a mostrar signos de mejoría.
El de Luz no es el único caso. En la misma escuela adonde concurre, la Media 4 de la localidad bonaerense de Hudson, partido de Berazategui, otros 3 chicos se contagiaron la enfermedad lo que generó alarma entre los papás de los adolescentes que asisten al colegio.
Preocupados, reclaman la acción de las autoridades sanitarias y denuncian a la escuela por no informar cuándo sucedió el primer caso, lo que pudo haber evitado el brote de tuberculosis, una enfermedad que lejos está de erradicarse en la Argentina.
«Cuando diagnosticaron a mi hija, el certificado decía TBC, pero la directora de la escuela no reconocía la siglas como tuberculosis y me dijo que necesitaba otro comprobante médico donde se especificara qué significa esa sigla, porque no me creía que fuera tuberculosis», se queja Daniela, en diálogo con minutouno.com.Esta situación, hizo que demorara la comunicación de las autoridades educativas a los papás de los alumnos.
«Queremos que hagan una desinfección profunda en la escuela y con la supervisión de Sanidad, porque la única desinfección que se hizo fue muy por arriba y no nos garantiza nada. Además, les reclamamos que nos den capacitación sobre la enfermedad para saber cómo responder en estos casos», cuenta Ana, mamá de una nena que concurre al colegio.
Existen dos tipos de tuberculosis: la pulmonar, que es la más frecuente y contagiosa, la cual representa alrededor del 80 al 85% del total de los casos; y la extrapulmonar, que afecta a otros órganos fuera del pulmón, como la pleura, ganglios, aparato genitourinario, columna.
En la actualidad, la tuberculosis -detectada hace 137 años- es la novena causa de muerte en el mundo y la primera causa de muerte por enfermedades infecciosas. En Argentina, el año pasado se notificaron 9.635 casos, y la mayoría se dio en personas de entre 20 y 44 años, de las cuales fallecieron 297 (7,6% más que en 2017), según datos de la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud.
«Los casos venían bajando, pero en los últimos años se estancó la baja y ahora en algunos lugares de la provincia de Buenos Aires aumentó», contó aminutouno.com Miriam Bruno, jefa del servicio de Promoción y Protección del Hospital Durand.
Para la pediatra infectóloga, el nuevo panorama «es preocupante» y significa que «estamos frente a una problemática importante para tratar».
Tuberculosis y pobreza
Bruno explicó que el hacinamiento -condición que suele estar presente en los sectores de mayor vulnerabilidad social- es un factor determinante para el contagio de la tuberculosis por lo que la enfermedad aparece en mayor medida en contextos de pobreza.
Por lo mismo, «las personas de menores recursos tienen más dificultades para completar el tratamiento contra la enfermedad, que son siempre muy largos, entonces presentan recaídas, lo que hace que la tuberculosis persista y siga contagiando a otros miembros de la familia o el barrio», remarcó la infectóloga.
«La bacteria está en el aire, y se transmite al toser. Si hay mucha gente junta, favorece la circulación de la bacteria y el contagio», describió Bruno.
Otro factor que complica la prevención rápida ante la aparición de un caso es que en los niños «es muy complicado detectar la enfermedad, por eso es más fácil el contagio». Frente a esta situación, el «Plan estratégico nacional para el control de la tuberculosis» obliga a los médicos a informar a las autoridades sanitarias cuando diagnostican una persona con TBC.
«Se debe informar al Ministerio de Salud, quien luego debe ordenar hacer controles a la familia de la persona con tuberculosis y a todos sus círculos para detectar de forma rápida si alguien más se contagió o bien para accionar de forma preventiva y evitar la transmisión de la enfermedad», precisó Bruno.
Precisamente esto es lo que cuestionan los padres de los estudiantes que concurren a la escuela Media N4 de Husdon, quienes denuncian que las autoridades no advirtieron a la comunidad educativa los primeros casos de tuberculosis, lo que hizo que se propagara la enfermedad a más alumnos.