Carne: evalúan otorgar 10% de descuento con débito

Preocupado por el repunte de la inflación en enero, Sergio Massa puso en marcha nuevas medidas para contener los precios. Después de anunciar la semana pasada la renovación de Precios Justos y los topes en los aumentos mensuales de unos 50.000 productos, en las próximas horas sumará el lanzamiento de un paquete destinado a contener el valor de la carne ante las subas registradas en las últimas semanas.

La primera pata del anuncio consiste en un descuento del 10% a los clientes en sus compras con tarjeta de débito en las carnicerías. La operación deberá hacerse a través de un posnet y el consumidor tendrá ese reintegro en su cuenta por hasta un tope de $ 10.000. La medida, no obstante, no será fácil de implementar teniendo en cuenta que el 90% de las operaciones son en la informalidad, según cálculos oficiales.

En segundo lugar, habrá un descuento del 90% en la cuota de autónomos a los adherentes al nuevo régimen, por lo que las carnicerías pagarán el 10% de su carga tributaria, un beneficio que no superaría los $ 4.000, según cálculos en la industria. Los comerciantes podrán descontar además el 5% de la factura de compra al frigorífico del impuesto a las Ganancias y Bienes Personales, y utilizar ese crédito durante el período fiscal de 12 meses.

El plan apunta a un sector que quedó afuera de los cortes cuidados, aún vigentes en las principales cadenas de supermercados. «La idea es que de esta manera el precio se mantenga, a la vez que regulariza la situación fiscal de las carnicerías», señalaron en la secretaría de Comercio.

Las medidas llegarán en medio de una aceleración en los precios. Las consultoras prevén una suba de entre el 5,5 y 6% en enero, por encima del 5,1% en diciembre. Según un relevamiento de LCG, la carne marcó el mayor aumento desde septiembre con una suba del 5,3% semanal en la quinta semana de enero y aportó un 60% al aumento de los alimentos, lo que podría reflejar subas preventivas en medio de la renovación de Precios Justos.

Massa anunció el viernes pasado una nueva edición ampliada del programa oficial, que abarca a 49.832 artículos, con subas topes de 3,2% mensuales, y una nueva canasta con 2.000 productos básicos congelados por 5 meses, cuyo listado aún no fue difundido. También presentó un nuevo software para controlar el cumplimiento del programa a través de un monitoreo virtual, todas medidas que reflejan las dificultades para anclar la inflación.

EcoGo estima que el IPC será del 5,9% en enero por un repunte en los alimentos y bebidas, entre otros rubros, y en particular por el fin de la tregua en la carne, que había traccionado a la baja el indicador. «El programa Precios Justos después de haber tenido buenos resultados en diciembre mostró sus primeros signos de agotamiento en enero, explicitando una vez más la limitación de la herramienta para funcionar como ancla», señaló la consultora.

La menor disponibilidad de alimento para ganado por la sequía llevó en los últimos meses a una mayor faena de ganado, lo que amplió la oferta de vacunos y acotó los precios. Pero ya en enero la reducción del stock disponible y la retención de animales se tradujo en una suba del 40% del precio de la hacienda en el Mercado de Cañuelas. Por ello, Massa busca ahora ampliar la oferta con incentivos a los ganaderos.

La cuarta pata del plan será un aporte no reembolsable para cubrir la mitad del costo del engorde del ganado contra una faena del 75% puesta a engordar en feedlot. Se les pagará hasta un tope de 70 cabezas por productor. «El tema es que los ganaderos no tienen más pasto en el campo, entonces lo llevan al feedlot para engordar y pagan un alquiler, el Estado va a invertir bastante y les va pagar la mitad de la alimentación», señalaron en Agricultura.

En la industria, creen que el descuento a los clientes podría ser viable, pero hay dudas sobre quién lo financiará y advierten que alcanzará solo a la «clase media» por el uso de medios de pago electrónicos. Por otra parte, consideran que el alivio impositivo es «irrelevante» porque la mayoría de las carnicerías está en la informalidad bajo el monotributo.