Riesgos para la salud, mal sueño y trastornos en la conducta son algunos de los efectos indeseados de compartir la cama con los perros o los gatos.

Dormir con las mascotas es algo habitual en muchas personas y, según un estudio hecho en Estados Unidos, uno de cada cuatro amos de perros y gatos reconoce que trata a sus animales como si fueran nenes chicos y la mitad reveló que descansa con ellos.

Si bien las mascotas son una fuente de apoyo y cariño, es necesario tomar algunas precauciones a la hora de practicar el colecho animal.

Riesgos para la salud

Dormir con las mascotas puede provocar alergia, asma o neumonitis por hipersensibilidad. Además, las mordeduras o los arañazos pueden provocar infecciones. Las personas de más riesgo son los más chicos, las embarazadas y los pacientes inmunodeficientes.

Problemas del sueño y contracturas

Problemas de conducta en los animales

Las mascotas que duermen con sus amos pueden experimentar un aumento en la agresividad y dificultades para separarse de ellos.

Efecto en las relaciones interpersonales