En medio de tensión con sindicatos, Gobierno dio por concluido aporte compulsivo para el gremio bancario
Por eso, agrega, «habiéndose vencido el plazo de vigencia de los acuerdos por los cuales se pactaron los aportes solidarios, no corresponde continuar reteniendo dichos aportes a los trabajadores no afiliados a la entidad sindical, todo ello en aras a defender no solo su salario y el carácter alimentario que posee el mismo, sino también los derechos que podrían verse vulnerados por la aplicación en el tiempo de una cláusula que se encuentra actualmente vencida».
«La imposición del pago de un aporte o contribución de solidaridad sindical a los trabajadores no afiliados exige para su validez que el aporte tenga un objeto determinado y no vaya a recursos de manera indefinida, que tenga un monto razonable, que no se equipare con el importe que abonan los afiliados en concepto de «cuota sindical» y que tenga una limitación en el tiempo. La falta de una limitación temporal, constituiría una configuración temporal lesiva que, de una manera ostensible, implicaría una carga destinada a lograr una compulsiva afiliación». sostiene.
La cuota alcanzaba el 1% de los ingresos de los empleados del sector financiero no afiliados al gremio bancario y se estima que, como mínimo, la medida provocaría una merma de $1 millón mensual para La Bancaria. Tendrá vigencia desde el 1 de febrero, y la incógnita pasa ahora por saber si el Ejecutivo decidirá aplicar la medida contra otros sindicatos.
La Resolución 2-E/2018 fue firmada por el viceministro de la cartera laboral, Horacio Pitrau, ya que el titular de Trabajo, Jorge Triaca, se encuentra de vacaciones y retoma su actividad oficial el próximo lunes.