En Victoria ya analizan duras multas para los autos que circulen por las islas
Sumándose a las denuncias de agrupaciones ambientalistas de Rosario, el Concejo Municipal de Victoria aprobará un proyecto para que la Intendencia de esa localidad sancione a los conductores que circulan y se instalan con sus vehículos en la zona de islas. Según advirtió la autora de la iniciativa, Graciela Bar, con la bajante del Paraná, a lo largo del Puente Rosario-Victoria proliferan las bajadas ilegales que son utilizadas para acceder a la costa del río. «Lo hemos denunciado varias veces, pero nadie hace nada», se quejó.
Mientras tanto, quienes se acercaron el sábado pasado a la tarde a las playas de la zona de islas volvieron a encontrarse con camionetas y 4×4 atravesando la playa, en franca contracción con el estatus de zona natural protegida que tienen los humedales.
«Las islas son una zona protegida, estos caminos se hicieron en medio de montes de sauces y cortaron varios ejemplares para abrirlos», advirtió Pablo Cantador, referente de la agrupación «El Paraná no se toca».
El ambientalista lamentó que, pese a la gran difusión pública que tuvo el tema durante la semana pasada, ni el concesionario vial del puente (Caminos del Río Uruguay), ni la Gendarmería, ni el municipio de Victoria hayan tenido presencia para impedir que nuevamente este sábado haya habido vehículos circulando en la zona del Paraná Viejo.
Según describió, «todos los fines de semana hay vehículos estacionados a lo largo de los 65 kilómetros del puente, sobre ambas márgenes, e incluso bajo los carteles que expresamente prohíben hacerlo».
Todos los organismos
«Llevamos mucho tiempo denunciando el problema de la cantidad de vehículos que ingresan a los terraplenes de las islas desde el puente», apuntó la concejala victoriense Graciela Bar. La también presidenta del bloque del Frente para la Victoria presentó un proyecto para que el municipio de esa localidad inspeccione y sancione a los conductores que lleguen con sus vehículos a la zona de islas, declarada área natural protegida de la provincia.
Según explicó, hay dos factores que resultan incompatibles con esta actividad, uno es el de la seguridad vial, ya que los coches ocupan las banquinas o salen y entran del puente por lugares prohibidos; y el otro es la protección del ecosistema propio de los humedales.
«Los primeros 1.500 metros al lado de la ruta están bajo la tutela de los concesionarios de la traza, de la Agencia de Seguridad Vial y de Gendarmería, mientras que al municipio de Victoria le corresponden todos los terrenos que están por fuera de esos bordes», apuntó.
Por eso, Bar presentó un proyecto de resolución para instar al municipio a coordinar acciones para prevenir el daño ambiental que provoca la circulación de automóviles. La concejala indicó que los inspectores de Tránsito de la Municipalidad están habilitados para hacer inspecciones y labrar actas, y el juzgado de Faltas debería sancionar a los dueños de los vehículos.
No es la primera vez que el Concejo de Victoria se hace eco de la necesidad de protección de la zona de islas. El año pasado ya se habían realizado gestiones para que el municipio victoriense vehiculice ante el gobierno nacional que se intime a la concesionaria Caminos del Río Uruguay, a Gendarmería, a Vialidad y a la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación para la resolución de problemas de inseguridad en la conexión vial.
Por esos días, veían necesario que se actuara ante «el desorden vehicular y la peligrosidad observada con hechos de quema de pastizales y tiros de caza» en un territorio protegido por su biodiversidad.
Más recientemente, en tanto, presentaron también otro proyecto de resolución para la prevención de incendios en las islas.
«Ni el concesionario, ni Gendarmería ni Victoria han tenido presencia para impedir que esto siga sucediendo»