Encuentran nuevo ADN en la escena del crimen de María Marta García Belsunce
Los investigadores citaron a Nicolás Pachelo, a su ex mujer y a cinco vigiladores a un cotejo genético.
A casi 16 años del homicidio de María Marta García Belsunce, el caso está lejos de quedar cerrado. Nuevos rastros de ADN fueron hallados en elementos recolectados en la escena del crimen, en el barrio cerrado Carmel de la localidad bonaerense de Pilar. Los investigadores del caso ahora citaron a Nicolás Pachelo, a su ex mujer, y a cinco vigiladores para realizar un cotejo genético.
Pachelo y su ex esposa, Inés Dávalos Cornejo, fueron imputados del crimen ocurrido el 27 de octubre de 2002, tras ser indagados por los nuevos fiscales a cargo del expediente, Andrés Quintana y María Inés Domínguez.
Los fiscales investigan la pista de un homicidio en ocasión de robo, la misma sostenida por los familiares y amigos de la víctima, entre ellos su viudo, Carlos Carrascosa, quien estuvo preso varios años por el hecho tras un fallo judicial que fue posteriormente revertido.
Roberto Ribas, abogado de Pachelo, admitió la citación de su cliente, aunque sostuvo que se «encontraron aparentemente tres marcas que ya existían» en la escena del crimen.
El letrado reclamó además que también sean cotejados los rastros genéticos de todos los que estuvieron implicados en la causa, lo que incluiría a Carrascosa y al resto de los allegados a María Marta.
«Quiero que lo hagan con todos. ¿Por qué solamente con Pachelo, los vigiladores y la ex señora de Pachelo?«, expresó en declaraciones al canal C5N. Sin embargo, admitió que es «lógico» el nuevo cotejo si aparecieron nuevas evidencias gracias al «avance de la ciencia».
Mientras se conocía la novedad en torno al Caso García Belsunce, a Pachelo le dictaban la prisión preventiva, junto a otros dos supuestos cómplices, por robos cometidos durante la última Semana Santa en el country Tortugas, de Pilar, causa por la que actualmente se encuentra preso.
Pachelo también fue procesado, bajo la sospecha de participar en una banda integrada por fisicultursitas que vendía drogas sintéticas.
María Marta García Belsunce, de 50 años, apareció muerta el 27 de octubre de 2002 en el baño de su casa del country El Carmel, de Pilar. La familia la veló en el misma propiedad y a todos les dijeron que había sufrido un accidente doméstico en el baño. Recién el 2 de diciembre de ese año los médicos forenses hallaron cinco proyectiles en la cabeza y se inició la investigación en busca del autor del crimen, aún inconclusa pese a los vaivenes e imputados que tuvo en estos años.