Gustavo Bordet destacó este miércoles las políticas ambientales de Entre Ríos, en el marco de la XI Asamblea Ordinaria del Consejo Provincial de Ambiente. En ese contexto, habló sobre el tema de las fumigaciones, que generó un conflicto entre productores y ambientalistas. Al respecto, resaltó el decreto que regula la aplicación de fumigaciones y subrayó: «Los fundamentalismos son malos».

«Hemos emitido un decreto que tiende a buscar un punto de equilibrio entre la razonabilidad que existe en algunos sectores de producción para no caer en quebranto por la no aplicación de pulverizaciones -hay casos que lo hacen para evitar enfermedades como es el caso del citrus con el HLB-, y también entiende el derecho de la salud que las personas tienen», afirmó.

Desde esta perspectiva, resaltó que el decreto «contempla perfectamente bien ambas situaciones; ha sido estudiado y tiene avales. Fundamentalmente vamos a establecer un estricto y rígido control para que no haya abusos en el uso de pulverizaciones y que quien las aplique inadecuadamente tenga todo el castigo de la ley que se merece». Sobre ello, remarcó que «hay temas de que salud que son prioritarios y en esto vamos a ser inflexibles».

En este sentido, también sostuvo: «Hay que encontrar siempre estas posiciones que contemplen las dos partes: vivir en un ambiente seguro y tener un sistema productivo que garantice que haya actividad económica en Entre Ríos. Los fundamentalismos de un lado y del otro son malos; no son buenos y no nos conducen a ninguna parte. Y como gobierno tenemos que encontrar un punto de equilibrio como lo hicimos con este decreto, que esperemos solucione los problemas».