La Fed recortó la tasa de interés de EEUU: qué implica y cómo afecta a la Argentina
La Reserva Federal (Fed) bajó este miércoles las tasas de interés por primera vez en más de cuatro años, una decisión que comienza a revertir las condiciones restrictivas que impuso para frenar la inflación. Los responsables de política monetaria optaron por un fuerte recorte de medio punto porcentual, para dejarlas en 4,75-5,00%.
El banco central estadounidense planea terminar el año con un recorte de medio punto porcentual adicional, señaló en un comunicado, en el que expresó «mayor confianza» en un descenso de la inflación en Estados Unidos. La decisión no fue unánime en esta última reunión antes de la elección presidencial del 5 de noviembre. La gobernadora Michelle Bowman votó por un recorte más pequeño, de 25 puntos básicos.
La Fed revisó a la baja su previsión de inflación, a 2,3% para fin de este año y a 2,1% para 2025. La meta de 2% de inflación, considerada sana para la economía, se alcanzaría en este contexto en 2026. El banco central aumentó su pronóstico de desempleo a 4,4% para 2024 y el año próximo.
La Fed espera además que el PBI de la mayor economía mundial crezca 2,0% en 2024, algo menos que el 2,1% esperado en sus estimaciones anteriores.
«El comunicado de la decisión destaca que el Comité de Política Monetaria ha ganado mayor confianza en la convergencia de la inflación al 2% objetivo. Con respecto al mercado laboral, considera que el crecimiento del empleo ha disminuido, pero que la tasa de desempleo sigue siendo baja. Esto implica un mejor balance en el mandato dual de la Reserva Federal de pleno empleo y baja inflación, según el comunicado, lo cual justificó la medida», señalaron desde Balanz.
Baja de tasas de la Fed: impacto en mercados emergentes y en la Argentina
La reacción inicial de los mercados fue positiva, con el S&P 500 avanzando 0,5% tras la noticia, pero hacia el cierre de la jornada fue borrando la suba y culminó finalmente en baja. Las tasas del Tesoro de EEUU operaron con bastante volatilidad, aunque con una compresión mayor en el tramo más corto con la tasa del bono a 2 años comprimiendo 5,5 pb hacia 3,55%.
La volatilidad reciente de la baja implícita y la dispersión de opiniones garantiza que algunos se sorprendieron, pero también que otros aprovechan a capturar beneficios, explicaron desde Delphos Investment.
Y esto generó un impacto significativo en el mercado de bonos de EEUU. En tanto, las monedas, los mercados de acciones, y las materias primas son una cuestión más abierta, y menos directa.
«Concentrándonos en los importantes mercados monetarios, creemos que una mayor depreciación del dólar será bienvenida por el resto de los mercados», remarcaron desde Delphos Investment, algo que finalmente sucedió. El principal foco global está puesto en el yen japonés y en el yuan chino (se apreciaban frente al dólar). «Todo lo cual es una dinámica clave para los activos latinoamericanos, en particular para el real brasilero y el peso chileno, además del argentino», agregaron.
Un recorte de tasas de la Fed es «siempre beneficioso para países periféricos. Esto se debe a que los activos del Tesoro de USA, son considerados como libre de riesgo, por tanto si el retorno de estos activos disminuyen los inversores buscarán instrumentos que presenten rendimientos superiores», remarcó Pedro Moreyra, director de Guardian Capital.
Es en esto último donde «aparecen opciones de inversión como los bonos soberanos argentinos, y el equity. Ese apetito por mayor riesgo, puede beneficiar la cotización de los activos argentinos», proyectó Moreyra.
Para Puente, «el mercado local ya se había anticipado a esta noticia. Los precios de los bonos soberanos argentinos han aumentado siete dólares desde principios de agosto, y consideramos que el driver detrás de esto fue mayormente externo, ya que se evidenció un comportamiento similar en soberanos comparables, sin haber demasiado driver a nivel doméstico».
De cualquier manera, expresaron que, «tras el anuncio los soberanos aumentaron otros cincuenta centavos en promedio y alcanzaron el nivel de abril, que había sido su máximo valor desde la reestructuración de 2020. A mediano plazo, creemos que un ciclo más expansivo de tasas por parte de la Reserva Federal puede ayudar al objetivo del Gobierno de retomar el acceso a los mercados internacionales, en la medida en que éste derive en un mayor apetito por activos emergentes».
Tras la pandemia, una combinación de escasez de bienes, gasto masivo, escasez de mano de obra, grandes déficits públicos y precios agresivos por parte de las empresas llevó la inflación de EEUU a su nivel más alto en 40 años en 2022. Aunque el crecimiento salarial también fue fuerte y para muchos trabajadores superó el ritmo de los aumentos de precios, la confianza fue sombría durante gran parte del tiempo, en un momento en que la Reserva Federal subió los tipos de interés para tratar de frenar la economía, los tipos hipotecarios subieron en respuesta y los bancos frenaron el crédito para muchos tipos de préstamos y prestatarios.
La inflación, según la medida más observada por la Reserva Federal, se encuentra ahora a medio punto porcentual del objetivo del banco central y se espera que descienda gradualmente durante el resto de 2024 y el próximo año. La economía se ha comportado mejor de lo esperado en casi todas las medidas y ahora se espera que la Reserva Federal cambie de marcha y ofrezca sus primeras pistas el miércoles sobre la rapidez y el alcance de su giro.
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