La Plata: liberaron a un hombre que fue denunciado 12 veces por intentar matar a su ex
La decisión fue de la Sala III de la Cámara de Apelaciones a favor de Lucas Grippo, quien esperará el inicio del juicio con una tobillera electrónica.
Melina Cruz denunció 12 veces a su ex pareja Lucas Grippo, por las agresiones y amenazas que le realizó durante más de ocho años. El acusado fue detenido, pero el las últimas horas la justicia sorprendió con una decisión que lo favorece. Grippo fue liberado en La Plata por decisión de la Cámara Penal de Apelaciones ante un recurso presentado por la defensa.
La última vez que la joven de 29 años denunció a Grippo, empleado administrativo y licenciado en Comunicación Social con quien tiene una hija de 7 años, fue en junio pasado, cuando la atacó en la calle y a la vista de todos con una trincheta.
«Ayer un fallo bastante amplio de la Sala III de la Cámara de Apelaciones dictó la falta de mérito para Grippo en la última causa por la que fue detenido hace 60 días y permanecía en la Alcaidía de Melchor Romero, ubicada la calle 520 y 185», dijo Juan Benítez, abogado de Cruz.
Según el letrado, «a entender de la Sala III no estarían dadas las condiciones para mantener la medida de coerción (detención) hacia Grippo. Eso no implica que fue sobreseído, sigue procesado pero deberá esperar el juicio oral en la casa», apuntó.
Grippo deberá usar una pulsera electrónica monitoreada por el Servicio Penitenciario Bonaerense, algo que había pedido la jueza Graciela Barcos, del Juzgado de Familia Nº 3, al momento de su detención, considerando el supuesto caso de que el hombre sea beneficiado con un recurso como el dictado ayer por la Cámara Penal de Apelaciones.
Pese a la decisión de esta sala, la fiscal Cecilia Corfield, quien lleva la causa por «tentativa de femicidio», no cambiará la carátula y según el abogado, cuando llegue el momento, pedirá la elevación a juicio por esa acusación.
La Sala III en su escrito afirmó que «no hay elementos probatorios» suficientes como para que Grippo espere el juicio dentro de un penal, con lo cual decidió la libertad hasta ese proceso judicial, con la restricción de la tobillera y de no acercarse a la denunciante por un radio de 700 metros.
A fines de junio Cruz fue interceptada por el acusado cuando caminaba por calle 115 y 42. Ese día Grippo le efectuó cortes en el cuello y manos con una trincheta pero, a pesar de haberlo denunciado, él le siguió enviando mensajes en los que la amenazaba de muerte no solo a ella sino también a su hija.
Tras estos hechos, la justicia le dio a la mujer un dispositivo que le advierte si el hombre se le acerca a menos de 400 metros.
En paralelo a esta causa, el 31 de octubre se iniciará el juicio oral contra Grippo por denuncias anteriores presentadas también por Cruz, en las que lo acusa por «lesiones y amenazas».