En un insólito allanamiento con gran cantidad de personal uniformado se allanó en la mañana del jueves el museo de la Ciudad Carlos Anadón. Incautaron dos estatuas que son del patrimonio local.43684232_1432398103562330_8063843438027603968_n

Las esculturas que representan a dos continentes fueron llevadas a Concepción del Uruguay. La justicia aduce que pertenecen al Palacio San José. Sin embargo se conoce que están en Victoria desde el año 1874 donadas por don Ángel Piaggio.

Las estatuas que habían sido sacadas de la Avenida Centenario para su preservación, ya que dos habían sido sustraídas del lugar de emplazamiento el mismo día que se habilitó el puente Victoria Rosario.

La comunidad de Victoria no deja de conmoverse por este hecho que ha dejado a la ciudad sin dos elementos que no sólo tienen certificación escrita de su existencia, sino también están llenas de anécdotas ciudadanas por lo que las convierten en un patrimonio muy querido por los victorienses.

Desde la municipalidad se ofreció una conferencia de prensa para aclarar sobre la extraña situación.

Alrededor de las 10:30 de ayer, una comisión encabezada por la fiscal Josefina Minatta, del Juzgado Federal de Concepción del Uruguay, acompañada por fuerzas de Prefectura y una delegación del Palacio San José realizó un allanamiento en el museo Anadón para dar cumplimiento a una orden del juez federal Pablo Seró, con el fin de secuestrar dos estatuas de mármol representando a los continentes de Asia y América, las que supuestamente habrían sido robadas en Concepción del Uruguay.
Ante la orden judicial, el director de Cultura, Luis María Andrade; el responsable del museo, Claudio V. González, y el asesor letrado de la Municipalidad, Eduardo Ruda, entregaron estos bienes voluntariamente, priorizando la seguridad de las piezas más allá de no estar de acuerdo con lo ordenado.
Las estatuas que este jueves se llevaron por una orden judicial están en Victoria desde 1874, cuando Piaggio las donó para la actual plaza San Martín. Hasta 1910 estuvieron en la plaza coronando la pirámide que en esa fecha fue trasladada a la plaza Libertad, reemplazándola por el monumento a San Martín.
Luego fueron colocadas en la avenida Centenario, de donde el 23 de mayo de 2003, en la noche del día en que se abrió el puente, fueron robadas. Eligieron las complementarias de las que habían robado en septiembre de 1991 del Palacio San José.
De esa serie de estatuas de los 4 continentes se hicieron muchas en el siglo XIX, de hecho, hay en Uruguay y en otras partes del mundo.
Las piezas que se exhibían en el museo fueron llevadas allí desde el corralón por Oscar Lami cuando era director del museo.
Las piezas que se llevaron nunca fueron del Palacio San José, sino que son patrimonio de Victoria.
Lamentablemente, hubo que dar cumplimiento a una orden judicial sin sentido, ya que se podría haber confirmado que no eran las que buscaban con mucha facilidad.
Las estatuas no fueron al Palacio San José sino que quedarán a resguardo en la Prefectura de Concepción del Uruguay según informaron los delegados judiciales.
Además, se entregó información documental sobre el origen y la historia de esas estatuas en nuestra ciudad, la que iremos ampliando con el correr de los días.
Cuando se hagan las pericias, presentaremos peritos de parte, expresaron los representante del municipio.