Pablo Giesenow, un abogado cordobés de 40 años que hace dos año perdió sus dos piernas en un accidente de auto, transformó esa adversidad en energía positiva que le permite llevar una vida normal, intensa y con grandes desafíos.

El 22 de enero de 2015 Pablo partió en su automóvil desde la ciudad de Córdoba con destino a Santa Cruz para visitar de sorpresa a su padre, que dos días después cumplía años.

Pero cuando transitaba por la ruta nacional 35 cerca de Santa Rosa (La Pampa), bajo una intensa lluvia, perdió el control del vehículo y chocó contra el guardarrail.

«Estuve media hora atrapado dentro del auto. Vi que los hierros me habían cortado una de las piernas a la altura de la rodilla», describió Giesenow en una entrevista a Télam y añadió que en el hospital se enteró que la otra pierna también había sido amputada por el accidente.