Producción vitivinícola en Entre Ríos: una industria en crecimiento
A principios de siglo XX, la vitivinicultura en la provincia fue destacada a nivel nacional, incluyendo a Entre Ríos entre muchas otras regiones del país que habían desarrollado esta actividad. Hoy los departamentos Colón y Concordia concentran la mayor superficie de viñedos.
Si bien la vitivinicultura en Argentina se inició de la mano de Domingo Faustino Sarmiento, fue a través de Justo José de Urquiza que comenzó a practicarse en Entre Ríos, llegando la superficie con viñedos a alcanzar en 1910 unas 4.800 hectáreas.
El proceso se completó con la ley N° 12.355, que proporcionó el esquema a través del cual se eliminaron definitivamente las vides fuera de las regiones citadas y cuyas tierras se entregaron a colonos para la producción de cualquier cultivo diferente del viñedo.
En la actualidad, la situación restrictiva con respecto a la producción de vinos se ha revertido, y en los últimos años la provincia se ha dado un crecimiento paulatino pero sostenido de los viñedos. El desarrollo de esta actividad se tradujo en la constitución de la Asociación de Vitivinicultores de Entre Ríos (AVER), entidad que nuclea a bodegas y viñedos provinciales y que se dedica a trabajar para el sector: investiga, releva, informa, difunde, organiza eventos y coordina actividades.
Estadísticas
De las 4800 hectáreas que existían a principios del Siglo XX, actualmente son apenas 68, puesto que apostar a la vid implica esperar cierto tiempo hasta entrar en plena producción de fruta y luego elaborar el vino. Son los departamentos Colón y Concordia los que concentran la mayor superficie de viñedos. Esto es, más del 70 por ciento de la superficie de viñedos se concentra en estos dos departamentos.
Distribución de la superficie de viñedos entre los departamentos por hectáreas
Colón 15,8
Concordia 33,8
Diamante 4,6
Gualeguaychú 4
La Paz 0,7
Nogoyá 0,25
Paraná 3,6
Uruguay 3
Victoria 1,25
Villaguay 1
Tipos de cepas que se cultivan en la provincia
Los tipos de uva que se cultivan son tinta, blanca y de mesa, y en las bases de datos hay un conjunto de viñedos que no están identificados con la variedad, por lo que se desconoce si entran en alguno de estos tipos generales.
Con todo, resulta de interés conocer las particularidades que tiene la producción vitivinícola de la provincia y que, justamente, tienen que ver con las variedades que se cultivan, puesto que hacen al tipo de producto final que sale al mercado.
La variedad tannat, representativa de Entre Ríos por su adaptabilidad a las condiciones locales, no es sin embargo la más importante en términos de superficie. Es levemente superada por la malbec, y por detrás de ella, la merlot, encabezando estas tres el ranking de cepas más importantes en la provincia.
Entre las blancas, la chardonnay supera ampliamente a todas las otras variedades, siendo proporcionalmente mínimas las superficies del resto.
Trabajo mancomunado para el crecimiento de la actividad
Desde el gobierno provincial se viene trabajando en el desarrollo y fortalecimiento de la actividad vitivinícola.
El secretario de Producción, Álvaro Gabás, expresó que “Entre Ríos cuenta con un gran potencial para el cultivo de la vid y la elaboración de vinos y espumantes, es por ello que resulta de suma importancia que la Secretaría de Producción se ponga a disposición para trabajar de forma coordinada junto a los productores entrerrianos en el perfeccionamiento de la cadena vitivinícola”.
Si bien en Entre Ríos representa una producción en pequeña escala que abastece básicamente a un mercado regional, la actividad se ha ido consolidando y en la actualidad existen gran cantidad de emprendimientos de este tipo, distribuidos en 10 departamentos de la provincia.
Entre Ríos durante mucho tiempo estuvo privada de producir vino en forma comercial. Si bien desde 1997 esa prohibición quedó sin efecto, actualmente desde el sector se trabaja en posicionarse nuevamente.