“Una lipotimia no va a impedir que cumpla con mi deber constitucional”, manifestó con humor el gobernador mientras era alentado por presentes en el recinto.

En ese marco, el mandatario provincial fue asistido por dos médicos y, pasados cinco minutos, logró recomponerse, pidió disculpas, explicó que se había tratado de un cuadro de lipotimia y finalizó su discurso.

En su exposición previa al desmayo, el gobernador Schiaretti había asegurado que su gestión «siempre» va a trabajar para “evitar las crisis y garantizar la gobernabilidad en la Argentina democrática”.

Además, el mandatario provincial resaltó que el modelo de gestión que lleva adelante desde diciembre de 2015 en el distrito, plantea, en el plano institucional, tener una “correcta relación» con el Gobierno nacional.