En el allanamiento encontraron documentación que pedían a las personas que buscaban alternativas ilegales para obtener el carnet. En la casa, también se toparon con otro grave delito

Este sábado se procedió a realizar allanamiento ordenado por el Juez de Garantías N° 8 a cargo de Gustavo Maldonado, que fue ejecutado por la División Delitos Económicos en un domicilio de calle Santa Elena.

Dicho procedimiento se dio a raíz de una investigaciones por denuncias sobre trámites para facilitar la obtención del carnet de conducir, en el cual mediante un ardid de evadir requisitos indispensables para la obtención del mismo se prometía evitar exámenes teóricos, prácticos y psicofísicos donde se obtenían las preguntas y respuestas de los mismos.

De la investigación se supo que además se prometía la reducción de brindar turnos especiales en menor tiempo con falsas promesas de obtener el carnet de conducir, para lo cual se solicitaba previamente un dinero en algunos casos de $3.000, $5.000 y hasta $17.000.

Durante la requisa se encontró documentación relacionada a la causa que se investiga. Había fotocopias de DNI de distintas personas, papeles anotados con datos personales de terceras personas, trámites de realización de carnet de conducir único, cuadernillos de estudio sobre la ley de tránsito, formularios de las preguntas que se realizan en el examen para rendir, dos teléfonos celulares y anotaciones con distintas categorías de carnet para tramitar.

Como si fuera poco, antes de finalizar el procedimiento se pudo visualizar una gran cantidad de especies de aves autóctonas de la provincia, y además una lechuza de campanario, una cacatúa ninfa, y un ave estornino, motivo por el cual se dio aviso a la Unidad Fiscal de Atención Primaria.

El fiscal Martín Abraham ordenó que se le diera intervención a la Dirección Prevención de Delitos Rurales, quienes realizaron la correspondiente Acta de Infracción de Ley Provincial de Caza N° 4841, y procedieron al secuestro de 59 aves de distintas especies, los cuales una vez trasladados son atendidos por personal veterinarios para ser llevados a una reserva natural Parque Gral. San Martín.