La abuela de la beba precisó que se realizaron dos denuncias, una de ellas por mala praxis por el fallecimiento de la recién nacida. La segunda denuncia presentada en fiscalía, apuntó directamente a que le cambiaron la beba recién nacida a su hija y solicitaron de manera urgente un ADN para establecer si fehacientemente la bebé que les entregaron en el nosocomio público local era la suya.

EL RELATO DE LA MAMÁ DENUNCIANTE

María Blanco Grieve, la mamá denunciante, señaló: «el 23 de enero fui al hospital porque estaba con dolores, dilatando y estaba de 36 semanas de embarazo. Me revisó la partera, pero no me dejó internada porque me dijo que no era necesario y que volviera el lunes a programar la cesárea, pero el domingo 24 volví porque tenía que ir a cesárea y le dije a las doctoras que estaban que mi nena estaba sentada”.

Posteriormente, la mamá explicó que “el médico me dijo que puje y que yo ya sabía qué hacer porque era mi cuarto parto” y agregó, con lágrimas en los ojos, que “fue en ese momento donde me salió mucha sangre de la nariz y me desvanecí”.

Luego -dijo la joven madre- «a eso de las 8 nació mi bebé y me la pusieron de espalda, lloraba y todo, ella era muy chiquita porque recuerdo que pesó dos kilos y medio. Luego, los doctores me avisaron que debían llevar la bebé porque le sentían un ruidito y estaba bien, pero tenían que hacerle una revisación, pero luego de más de horas de desesperación esperando, llegó una doctora y me dijo que mi bebé estaba muy grave y que había que esperar 48 o 72 horas para ver cómo evolucionaba. La verdad que nos sorprendimos porque en el embarazo yo no tuve ninguna complicación”.

Blanco también indicó: “Cuando pudimos ir a ver a la bebé a Neo nos sorprendió que la bebé que nos entregaron tenía como un kilo más porque mi bebé pesaba apenas dos kilos y medio, era bien blanca. Digo esto porque la mía era de piel morena, bien velluda y el ombligo que tarda un buen tiempo en curarse, ya lo tenía bien sequito, eso nos sorprendió mucho”.

“Luego me llamaron de la Neo y cuando vi a la bebé, ya tenía la cara hinchadita y las manos y pies moraditos”, puntualizó la madre, al tiempo que agregó: “me empezaron a decir que la bebé estaba mal, que estaba anémica y que no le estaban funcionando los medicamentos. Luego de algunas horas volví a entrar y vi que estaban encima y me dijeron: no mamá, la bebé no aguantó más, hicimos todo lo que pudimos, pero le dio un paro y no la pudimos reanimar”, dijo María sin poder contener el llanto.

La madre señaló enfáticamente: “En el papel pusieron que la bebé era prematura pero no es verdad. En el hospital me pusieron que fue un fallo multiorgánico”.

Por último, María contó que “el 27 yo fui a hacer la denuncia a Fiscalía y me atendió la doctora Julia Rivoira”.

Ni la autopsia de la bebé me dejaron hacer”, se quejó la mujer y señaló: “Capaz que me hicieron un cambio porque nuestra bebé venía bien y cuando la parí era chiquita”. Finalmente, subrayó: “Si no tengo respuestas para mañana (miércoles) nos manifestaremos en Tribunales”.

Fuentes: El Sol – Diario Río Uruguay