Volvió Maidana: "Mayweather es una nena, quiero la revancha"
El púgil santafesino volvió a la Argentina y, apenas aterrizó, expresó su alegría por el buen combate que hizo a pesar de la derrota y manifestó su deseo de tener revancha contra el mejor boxeador libra por libra de la actualidad.
«Hice todo lo que podía y no alcanzó pero estoy contento», dijo Marcos René «Chino» Maidana en su llegada a Ezeiza en una entrevista con TN. Además, agregó que dejó todo y ahora solo piensa en descansar mientras espera otra oportunidad.
Con una sonrisa en su rostro mientras era asediado por los periodistas en la puerta del aeropuerto, el «Chino» tiró: «Mayweather es una nena, un llorón, quiero la revancha y la quiero ya. Dijo que se iba a cruzar conmigo y salió corriendo».
El púgil santafesino expresó que fue un combate muy bueno en el cual salió a pelear y ganarle pero no alcanzó. «Fue incómoda la pelea pero hice mi trabajo para acomodarme. Me faltaron golpes y alguna caída para ganarle», agregó.
«Él estaba sorprendido cuando lo atacaba, no sabía qué hacer. Lo dominé toda la pelea», sostuvo e ironizó que el rodillazo en la zona baja, por el cual Mayweather se quejó en conferencia de prensa, se le escapó «sin querer».
«Estoy contento por haber hecho una buena pelea al triple campeón mundial libra por libra. Me complicó el tema de los guantes», explicó sobre el combate más importante de su carrera como profesional ya en suelo argentino.
Además, el boxeador agradeció el apoyo del público y dijo que no esperaba un recibimiento así mientras algunos de los fanáticos que lo fueron a recibir cantaban «dale campeón, dale campeón». «Nunca viví algo así, es muy lindo», aseguró.
Maidana manifestó que ahora irá a descansar a Margarita, donde reside junto a su familia, y esperará tranquilo tener una segunda oportunidad ante Mayweather, que podría darse en septiembre. «Vamos a ver más adelante qué pasa, ojala se dé», agregó.
Las perlitas del «Chino»
Mientras bajaba del avión le pidió a uno de sus acompañantes: «Que no se me pierda la guitarra, agarrala que va ahí». Confesó que se trata de un instrumento muy importante para él porque se la obsequió el músico Antonio Tarragó Ros.
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