Gustavo Bordet: “Esta semana he firmado el decreto para el llamado a concurso en el Tribunal de Cuentas”
Gustavo Bodert reconoció que a mediados del año pasado comenzó a pensar en un segundo mandato y este domingo es el favorito de acuerdo al resultado de las PASO del 14 de abril.
El gobernador Gustavo Bordet aspira a un segundo mandato y de acuerdo a las PASO del 14 de abril, todo indica que este domingo se consagrará por segunda vez como gobernador de los entrerrianos. En una entrevista concedida al programa Cuestión de Fondo (Canal 9 Litoral), Bordet confesó que recién en agosto o septiembre del año pasado comenzó a pensar en la posibilidad de buscar este segundo mandato; porque en los años anteriores tuvo que focalizarse en cómo sanear las finanzas públicas y resolver el enorme déficit y deuda que le había dejado su antecesor Sergio Urribarri. Una vez encaminada la provincia, Bordet sostiene que hay que consolidar tres ejes para el desarrollo: el sistema portuario integrado; avanzar en una nueva matriz energética y mejorar los caminos de la producción. También aseveró que tiene 1.800 empleados menos que cuando asumió en 2015, sin necesidad de echar personal de manera injustificada, que redujo en 120 los cargos políticos y anunció que concursará el cargo de Presidente del Tribunal de Cuentas, un hecho inédito en la historia provincial. Por último, se animó a plantear la necesidad de cambiar la estructura del Superior Tribunal de Justicia, reduciendo la cantidad de vocales.
-¿Cuándo se convenció que debía ir por una nueva gestión en la provincia?
-En realidad, el contexto en el que me tocó asumir en diciembre de 2015 era muy incierto, teníamos varios desafíos y cuestiones por resolver. Algunas eran muy urgentes como la de hacer frente a las obligaciones corrientes que tiene el Estado. Mínimamente eso era pagar los sueldos y las jubilaciones en término. Nos pusimos a trabajar muy fuerte. Teníamos un déficit estructural que impedía programar y que nos obligaba a renovar Letras que vencían cada dos meses, con una alta tasa de interés. Y esa fue la preocupación más grande que tuve, diría, durante los dos primeros años de gestión. Nuestro Norte fue ordenar la provincia, dar previsibilidad, tener un funcionamiento administrativo que nos posibilite ejecutar el presupuesto. A partir de ahí, elaborar un amplio plan de obras públicas, generar acciones que tiendan a mejorar las condiciones sociales y sanitarias de nuestra población. La de lograr que los programas se apliquen en todo el territorio. Hacer obras y acciones en los Municipios, coordinados con los intendentes y fueron ellos los que definieron cuáles eran las obras más importantes que necesitaba cada ciudad de la provincia y nosotros conseguimos los recursos. Recién cuando la gestión perfilaba en su tercer año, que habíamos logrado consolidar las cuentas públicas, nos habíamos desendeudado en el corto plazo; levantamos todas las Letras que había y que en esa época representaban 1.500 millones de pesos y las cancelamos y a otras las diferimos a largo plazo (hoy estaríamos pagando un interés por esas Letras del 85 por ciento, aproximadamente, lo cual haría inviable a la provincia). Recién ahí, en ese contexto, promediando el tercer año de gestión, en agosto o septiembre del año pasado, recién comencé a pensar en la posibilidad cierta de tener la oportunidad de hacer uso de la cláusula constitucional de reelección. Y después plantear sobre esta base de lo que habíamos construido, lo que nos queda pendiente, para las cuales tenemos políticas públicas que van en ese sentido. Tenemos tres ejes grandes que acompañan a nuestro sistema productivo y de economías regionales en la provincia: uno es el sistema portuario integrado. De no tener ningún puerto habilitado en la provincia de Entre Ríos, hoy tenemos habilitados La Paz, Diamante y Concepción del Uruguay. También habilitamos el puerto de Ibicuy, que durante años se prometió y nosotros lo pusimos en marcha. Terminamos el muelle y la obra civil. Hoy Ibicuy está exportando al mundo los productos no solo entrerrianos, sino de la Mesopotamia. La madera que viene y se exporta a China, es madera misionera. Viene en tren y llega hasta Holt Ibicuy, que hacía 28 años que no veía llegar un tren a ese pueblo. El segundo eje es avanzar hacia una nueva matriz energética. Comenzamos a desarrollar, primero con fondos propios y ahora conseguimos financiamiento internacional para hacer el cierre energético del Norte entrerriano. Era una asignatura pendiente de los años ´80 del siglo pasado. Esto se une también con el gasoducto, que unirá los dos troncales: el que va paralelo a la Ruta 127 y el que paralelo a la Ruta 14; a la altura de Conquistadores hasta Chajarí. Esto significa una repotenciación en gas natural; además de toda la conectividad con fibra óptica para el Norte entrerriano, donde, por ejemplo, las señales son muy débiles y no puede haber conexiones en una era digital como tanto se necesita. El tercer eje tiene que ver con el estado de nuestros caminos. Tenemos una red primaria donde trabajamos fuertemente y que es muy caro. Además, todos los convenios que había de Nación-Provincia se cayeron todos y tuvimos que hacernos cargo. Y ahora que estamos nuevamente en marcha, en esta segunda etapa queremos trabajar ejecutando toda la red secundaria y terciaria, es decir, los caminos de la producción; para que nuestros productores, sobre todo las economías regionales perecederas como el sector lácteo, pueda salir rápidamente con los productos”.
-¿No le teme a los segundos mandatos, donde los funcionarios se relajan un poco y hasta hacen algunas cosas que nunca hicieron en un primer gobierno?
-En absoluto. Primero porque tengo una experiencia muy positiva. Fui reelecto intendente en mi ciudad de Concordia con el 70 por ciento de los votos. Tenía once concejales de nuestro espacio político sobre trece bancas. Podía haberme relajado, pero, no. Mi segundo mandato fue mucho mejor que el primero, porque tenía la experiencia, tenía la confianza para hacerlo y tenía el apoyo de los ciudadanos y eso es fundamental. Y cuando uno gana por una buena diferencia, como me tocó ganar en Concordia o ahora en las PASO, lejos de confiarse; esto a mí personalmente me genera una gran responsabilidad de devolverle al ciudadano que confío en nosotros de una manera contundente con trabajo, con acciones, con compromisos en gestión de gobierno. Entonces entiendo que una segunda gestión de gobierno, nos va a encontrar con la experiencia, centrados, con madurez política y personal para llevar adelante la gestión. Y la verdad es que lo hago con mucho entusiasmo y tengo una gran expectativa para esta provincia y nunca me relajaría, nunca haría cosas que no hice. No me interesa otra acción que la de trabajar fuertemente por mi provincia y cuando hay ratos libres dedicárselos a mi familia y con eso estoy más que bien pagado.
-Hay funcionarios que están en el Estado desde la primera gestión de Sergio Urribarri e incluso de la última de Jorge Pedro Busti. ¿No es hora de cambiar algunos colaboradores, si llegan a un nuevo mandato?
-Permanentemente he estado haciendo cambios de funcionarios en mi gestión y en mi gobierno. Cada vez que fue necesario hacer cambios, lo hice. Y si ustedes analizan las estadísticas, se encontrarán que debo haber sido el gobernador que más cambios hice de gabinete en todo este tiempo. Cuando asumí había doce Ministerios. Hoy hay cinco. Y eliminé entre Ministerios, Secretarías, Subsecretarías, Direcciones y Coordinaciones, más de 120 cargos. Hubiese podido reemplazarlos por otros 120 compromisos políticos; pero había que ordenar el Estado y las cuentas públicas. Entonces, trabajamos en ese sentido. Los cambios son siempre necesarios y hay que ir monitoreando. No evalúo a un funcionario por la cantidad de tiempo que está en un cargo; lo evalúo de acuerdo a la eficiencia que tiene y de acuerdo al compromiso. Y relacionado con la pregunta anterior, toda nueva gestión necesita un relanzamiento y no tengan ninguna duda que vamos a hacer muchos cambios para la gestión que viene. Y habrá una renovación de funcionarios, porque hay que tener energías nuevas; hay que corregir lo que está mal y yo estoy dispuesto a hacerlo. Como lo hice antes, lo volveremos a hacer; porque lo que interesa aquí no son los funcionarios; interesa la gestión y la gestión es para los ciudadanos. Los funcionarios dependen todos de cómo se ejecute la función y si es satisfactorio continuarán en sus cargos, caso contrario se los cambiará; porque para eso es el compromiso que asumimos con los entrerrianos: tener una gestión al servicio de la población.
-La sociedad exige más transparencia. Sin embargo, hay lugares de la administración pública que no funcionan con esa premisa. ¿Qué va a hacer para revertir esas u otras situaciones?
-Lo primero que quiero decir es que Entre Ríos está en el segundo lugar en el orden de transparencia entre las 24 provincias argentinas; muy cerca de Córdoba que es la primera. Esto lo mide el CIPPEC (Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento) que es una ONG independiente de cualquier signo político-partidario y muy prestigiosa con sede en Buenos Aires. Y que nos coloque en este nivel de transparencia nos pone muy contentos, pero también nos obliga a trabajar en más normas de transparencias. Si algo le hemos dado a nuestra gestión, es la posibilidad de que cualquier ciudadano tenga acceso a la información pública del Poder Ejecutivo. Quien nos pide una información, automáticamente la tiene; todos nuestros actos son transparentes. Cuando hubo que sacar funcionarios porque estaban sospechados, o había semi plena prueba o indicios de mal comportamiento en sus funciones, automáticamente los hemos hecho a un costado. La transparencia ha sido un Norte. Esta semana he firmado el decreto para el llamado a concurso en el Tribunal de Cuentas. También convocaremos a concursos en otros institutos que están previstos en la Constitución reformada (en 2008). Nuestra gestión ha sido la primera después de la reforma de la Constitución ha comenzado a trabajar sobre los institutos que nunca estuvieron reglamentados. Y estamos dispuestos a hacer todas las acciones para mejorar la calidad y la transparencia institucional. No tengo problemas que se publiquen los sueldos, cuánto gana desde el gobernador hasta el último empleado de la provincia, pero encuentro a veces más dificultades en la oposición. Y sería bueno que también los miembros de los otros Poderes del Legislativo y Judicial, hagan lo mismo y que la gente sepa cuánto gana cada uno. Yo no tengo problemas en explicitarlo y tenemos una gestión abierta. Lo que sucede en las Cámaras es responsabilidad del Poder Legislativo y lo que sucede en la Justicia es responsabilidad del Poder Judicial. Esto está en un principio republicano y que es la división de Poderes. De todos modos, nosotros estamos siempre tendientes a evitar que se gaste un peso más o un peso indebido en cualquier Poder del Estado y así lo advertimos. Y estamos dispuestos, después de esta elección, en la composición de ambas Cámaras de hacer un compromiso de bajar el presupuesto en el Poder Legislativo con las nuevas autoridades que asuman.
-¿Piensa trabajar en otras modificaciones en la Justicia? Como, por ejemplo, reducir el número de vocales del Superior Tribunal.
-La posibilidad de reducir el número de vocales lo quise hacer ahora. Y crean que fui el único que lo quiso hacer. Después las presiones de las organizaciones civiles que están siempre ligadas a lo judicial, las corporaciones se oponían, al igual que la oposición. Eran muy pocas las voces que querían la reducción de miembros del Superior Tribunal de Justicia. Además, entiendo que los miembros del Superior Tribunal tienen que tener opinión en todo. Se debatió mucho que algunos miembros debían ser especialistas en materia Penal, otros en lo Laboral; en los Civil o Administrativa. En realidad, un miembro del Superior Tribunal tiene que ser mucho más que eso. Tiene que ser una persona que tenga la ecuanimidad para poder decidir sobre la constitucionalidad de los actos en el pleno, lo mismo que tengan la ecuanimidad para resolver sobre la libertad y los bienes de las personas. Es mucho más amplio, no puede circunscribirse a una rama del Derecho; esto es lo que interpreto. Y con respecto a los cambios, por supuesto, quiero avanzar firmemente hacia el juicio por jurado.
-¿La causa de los contratos legislativos truchos, podría decirse que fue lo que más lo conmocionó políticamente por sus derivaciones?
-Es una causa que evidentemente tiene un impacto político y mediático muy fuerte e impactante. Como en todas las causas que se han investigado, nosotros hemos prestado toda la colaboración necesaria a la Justicia para que actúe e investigue. En lo que me compete desde el Poder Ejecutivo, siempre estuvimos a conteste; nunca hemos tenido sobre nuestra gestión una denuncia que pase por alguna sospecha en determinado acto de gobierno. Y eso que hay muchos actos de gobierno y que se realizan todos los días y a los cuales estamos expuestos. La Justicia investigará y nosotros seremos totalmente colaboradores en esta materia para que se esclarezca y que no le quede ninguna duda a ningún ciudadano en la provincia.
-¿Cómo deja la provincia? ¿Con cuánta gente la recibió y cuántos empleados quedarán al 11 de diciembre?
-Cuando asumí en diciembre de 2015 había 89.881 empleados. Hoy, hay 88.187 empleados; es decir, 1.800 empleados menos. No echamos a nadie ni tampoco hicimos el ajuste que hizo el Gobierno Nacional dejando sin trabajo a personas, detrás de las cuales hay una familia. Este decrecimiento se da porque nos autolimitamos y no hemos incorporado absolutamente a nadie. Sí hubo reemplazos porque hay nuevas escuelas; hay que contratar nuevos docentes; hay nuevos centros de salud y se amplían hospitales y eso implica contratar a nuevos agentes sanitarios. Pero hoy tenemos 1.800 empleados menos que cuando asumí en 2015. Y cuando termine la gestión habrá 2.500 empleados menos. Y esto también lo hemos trabajado con CIPPEC, para tener una trazabilidad a diez años. En nuestra segunda gestión será exactamente igual. Así como ajustamos la estructura política eliminando 120 cargos o dependencias, también a medida que haya un decrecimiento vegetativo por jubilaciones, renuncias y otras causales, la planta se irá reduciendo también de este mismo modo. Y otro dato importante: el 45 por ciento de los 88.187 empleados son docentes, que educan a nuestros hijos. Y de eso nos hacemos cargo. Por eso hay que tener en cuenta esa cuestión: 45 por ciento son docentes; 23 por ciento son agentes de salud; y un 15 por ciento son del servicio penitenciario y policial.
-¿Cuánto definirá usted, después de las elecciones, quiénes serán los candidatos a legisladores nacionales del PJ entrerriano? ¿Ya habló al respecto con los Fernández? ¿Pedirá poder de veto en la lista como hizo con los candidatos provinciales?
-Ahora estamos enfocados a las elecciones de este domingo. Es un proceso que en la provincia de Entre Ríos lo construimos con once partidos políticos, teniendo como principal eje al Partido Justicialista. Hemos logrado un acuerdo en lo interno también muy importante. Terminado el 9 de junio, nos sentaremos primero hacia dentro del justicialismo, como presidente del partido; luego con el resto de los partidos que integramos el frente para tomar una decisión que tiene que ir en el sentido de lo que sea mejor para la provincia de Entre Ríos. Ahí vamos a definir cómo nos plantaremos ante un escenario electoral nacional que hoy es muy volátil. Y de acá al cierre de lista habrá mucha tela para cortar. Por eso, después del 9 de junio se abre esta nueva etapa sobre la cual estaremos trabajando.