El hoy arquero suplente del Xeneize tiene un problema en una de sus rodillas y no volvería a jugar hasta el año próximo

Sergio Romero encendió las alarmas en Boca este jueves por un nuevo inconveniente físico. El arquero no pudo terminar la práctica en el predio de Ezeiza debido a una sinovitis en una de sus rodillas, a dos días del último partido del Xeneize en la temporada, contra Independiente en La Bombonera, por la fecha 27 de la Liga Profesional.

Aunque la idea siempre fue que atajara como titular Leandro Brey, la dolencia que sufrió Chiquito generó cierto temor por sus antecedentes en esa zona. Antes de debutar en el arco xeneize, en septiembre de 2022, tuvo que someterse a una operación en su rodilla derecha que dilató su primera presentación hasta enero de 2023. Previamente, también había padecido algunos problemas allí cuando vestía los colores de Venezia de Italia, consignó TyC Sports.

El misionero también había pedido el cambio el pasado 31 de agosto, cuando era indiscutido con Diego Martínez como entrenador. Aquella vez, había tenido un fuerte dolor en el hombro izquierdo tras chocar con Enzo Copetti, delantero de Rosario Central, pero los estudios descartaron una ruptura. A partir de la llegada de Fernando Gago, perdió el puesto con el surgido en Los Andes y atajó solo dos veces como titular, en la derrota 3-0 ante Tigre -con responsabilidad en los goles del Matador– y en el empate sin goles con Huracán en el Ducó.

Por otra parte, es probable que, si Fernando Gago resguarda a Chiquito Romero, el suplente designado sea Javier García. De todas formas, ya se sabe que el golero de 37 años terminará su contrato en diciembre y no seguirá el año que viene. El Consejo de Fútbol irá a buscar un tercer arquero para que compita con el ex-Selección y Brey. Están en carpeta Washington Aguerre -Peñarol-, Guido Herrera -Talleres- y Brayan Cortés, de Colo-Colo, pero aún no avanzaron por ninguno formalmente.