El frío, la humedad y las comidas calóricas, característicos del invierno, resecan la piel y desmejoran notablemente el aspecto de ciertas zonas del cuerpo que suelen descuidarse durante esta época del año. Si a eso le sumamos que durante los meses de verano solemos exponernos al sol y dejar para un segundo plano el cuidado de la piel, este tiempo resulta clave para revertir esos daños.

La médica dermatóloga Irene Bermejo aconsejó que durante el invierno es importante remover la piel vieja y humectar. Para eso es esencial saber qué tipo de crema debemos usar; por ejemplo en las pieles grasas las cremas deben ser más ligeras en tanto que en las pieles secas, deben ser más de tipo oleosas que permiten la humectación por más tiempo.

Por su parte, la especialista en dermatología Adriana Raimondi aseguró que «las respuestas de nuestra piel a las bajas temperaturas incluyen cambios vinculados con la termo regulación, que se traduce principalmente en la palidez de la piel». Es por eso que solemos maquillarnos más que en otras épocas del año, pero no hay que olvidar que a la hora de desmaquillarse es fundamental usar un humectante apropiado para nuestra piel, como así también usar un exfoliante una vez por semana.

Cabe tener en cuenta que, además del rostro, las zonas más secas del cuerpo son los brazos y las piernas y hay que hacer hincapié en ellos. Para cuidarnos las manos debemos utilizar guantes, que favorecen la permanencia de la humedad en la piel y evita las manos resecas, no sólo por el frío, sino también por el lavado permanente y el uso de geles antisépticos, sin la respectiva humectación.

En resumen, la piel se vuelve más sensible, por lo cual hay que humectarla diariamente, así como también vaporizarla con agua termal en áreas calefaccionadas y beber mucho líquido. Como los labios poseen menor cantidad de glándulas sebáceas se deshidratan más rápidamente. Una buena opción es siempre tener a mano un bálsamo para labios y una crema para manos, dos sectores del cuerpo muy expuestos.

Los especialistas aseguran que el invierno es la época ideal para tratar el rostro, ya que al estar alejados del verano y de la exposición al sol, se evitan posibles complicaciones. En ese sentido, aconsejan que una vez por mes es una frecuencia razonable para prácticas de consultorio, ya sea de cosmética o de tipo láser.

Tratamientos no invasivos con resultados a corto plazo

En el caso de las mujeres mayores de 50 años o aquellas con las pieles muy castigadas, el invierno es un buen momento para tratar las arrugas profundas y elastosis. La doctora Bermejo sugirió el uso de la tecnología iPixel CO2 especialmente indicada para tratar rápida y eficazmente, arrugas de rango medio a profundo, sin necesidad de intervención quirúrgica.

Además, el iPixel CO2 reduce la apariencia de poros abiertos, devolviéndole a la cara el tono, brillo y textura de una piel joven. El tratamiento se realiza en una sola sesión en la que rápidamente se notan los resultados.

Otra alternativa es la tecnología Impact que se realiza con láseres ablativos que pueden ser el Erbium Co2 o Pixel de radiofrecuencia. Una vez que se realiza la ablación con el laser, se aprovechan los pequeños orificios de la perforación y se introducen sustancias diversas como ácido hialurónico, retinoico, u otras. El impacto genera que penetre el fármaco por ultrasonido, lo que favorece la reepitelización y estimula la piel de acuerdo a las características de la sustancia utilizada.

Para lograr un tensado de la piel del rostro, que suele volverse más flácida con el paso del tiempo, la doctora Mariela Jaen, recomendó el equipo Accent Ultra, que ayuda a disminuir la grasa localizada en zonas conflictivas como papada, cuello y párpados, combinando las tecnologías de ultrasonido y radiofrecuencia.

La tecnología de ultrasonido de Accent Ultra es selectiva y no invasiva, y se dirige a los cúmulos grasos localizados para reducir la adiposidad localizada con total seguridad y eficacia. Su onda mecánica destruye la pared del adiposito (célula grasa), lo elimina y no se vuelve a regenerar.

Luego de la eliminación del adiposito, la radiofrecuencia dual de Accent Ultra genera un incremento de la temperatura en todos los estratos de la piel, ayudando a la formación de colágeno, mejorando la circulación y tensando la piel. Esta tecnología emite un calor terapéutico a diferentes profundidades del tejido facial. La combinación de un calentamiento dérmico y subdérmico en áreas grandes para estimular la remodelación del colágeno (tecnología Unipolar) con un calentamiento superficial para provocar el tensado de la piel, suavizando las arrugas y los pliegues (tecnología Bipolar) es el tratamiento perfecto para luchar contra la piel laxa de la cara.

Para casos de mujeres más jóvenes que noten laxitud en su piel, que sin el bronceado típico del verano se nota aún más, pueden recurrir a un tratamiento infrarrojo cercano (NIR) disponible en el equipo Harmony XL con la tecnología ST. Este procedimiento no invasivo, calienta la piel profundamente por debajo de las capas visibles, generando la contracción del colágeno y regeneración de la dermis. De esta manera, se remodela la piel y se logra un estiramiento natural de la misma.

Es común que en invierno, al tener la piel más pálida, tomemos conciencia de ciertas manchas que en otros momentos del año no notamos. Raimondi explicó que «para la mayoría de las lesiones pigmentadas benignas que puedan ser una preocupación estética, esta es una solución no invasiva ideal ya que al exponer una mancha a pulsos cortos y de alta intensidad de luz, la temperatura de la melanina aumenta rápidamente, y se fragmenta en partículas más pequeñas que son luego eliminadas por el propio organismo sin dejar rastro en la epidermis».

También pueden tratarse de este modo otro tipo de lesiones vasculares benignas como las arañitas, rosácea, manchas en vino de Oporto, hemangiomas, eritema, poiquilodermia de Civatte, entre otras. Es un tratamiento no invasivo eficaz para un problema cosmético muy común cuya duración por sesión es de aproximadamente 20 minutos.

En conclusión, esta época del año es ideal para optimizar nuestro tiempo, nutriendo y mejorando el aspecto de nuestra piel con cremas y tratamientos no invasivos que nos permitirán lucir una piel sana en pocos meses y llegar espléndidas al verano.