Los principales destinos turísticos entrerrianos registraron un intenso movimiento turístico durante el fin de semana, impulsando los niveles de ocupación hotelera a casi el 80 por ciento y marcando un crecimiento respecto a lo ocurrido en el invierno del año pasado, informó el Gobierno provincial

Las termas y las actividades en la naturaleza fueron los principales atractivos para los visitantes que llegaron a Entre Ríos principalmente desde ciudades de la provincia de Buenos Aires, la Ciudad Autónoma y las provincias de Santa Fe, Córdoba y Corrientes.

De acuerdo al relevamiento del ministerio de Turismo de Entre Ríos, los niveles de ocupación durante el fin de semana rozaron el 80 por ciento, marcando un crecimiento de casi diez puntos respecto al fin de semana anterior.

En la medición global, las vacaciones de invierno 2017 también resultaron ser más positivas para el sector turístico que las del año pasado, al menos en cuanto a niveles de ocupación. Si bien la primera semana arrancó floja (aún no habían iniciado su receso Buenos Aires y CABA), en la segunda semana el repunte se percibió claramente en la mayoría de los destinos de la provincia.

Entre los días 10 y 16 de julio (sumando días de semana y de fin de semana), la ocupación promedió el 50 por ciento; y en la semana del 17 al 23 ese número se extendió a un 67,5 por ciento.

Los datos marcan un pequeño crecimiento respecto al año pasado. El promedio global de ocupación en las dos semanas de vacaciones de 2016 fue del 57 por ciento; mientras que este año llegó al 59. Consultado experimentados propietarios de hotelerías por estos informes provinciales, hubo casi una respuesta unánime: “con una ocupación del 60 % en hotelería se alcanza a pagar personal, reposición y servicios, para que las empresas puedan tener superávit tendrían que llegar a superar el 65 % para encontrar rentabilidad”.