El 1° de abril de 2017 la joven de 21 años salió de un boliche en Gualeguay y nadie más supo de ella, hasta que, una semana después, apareciera muerta en un campo de la zona. Su muerte conmovió al país entero, su legado promete multiplicarse en sus compañeras de militancia que llevan su sonrisa como bandera.micaela

Se cumplen 2 años del femicidio de Micaela García

El crimen de Micaela García conmocionó a todo el país. Tenía 21 años y militaba por los derechos de las mujeres y contra la violencia de género; había nacido en Concepción del Uruguay, aunque vivía en Gualeguay, donde cursaba el profesorado universitario de Educación Física.
Desapareció el 1° de abril de 2017 y una semana después encontraron su cuerpo debajo de un árbol, ubicado en un campo denominado Seis Robles, a 2,5 kilómetros de la Ruta 12. El hallazgo estuvo a cargo de un equipo policial que formó parte del operativo de más de doscientos efectivos que se dedicó durante toda la semana al rastrillaje de las zonas de campo, aunque luego dijeron que fue un baqueano el que logró dar con el cuerpo de Micaela.
Por el hecho fueron apresados Sebastián Wagner, quien confesó haber violado a la joven y fue condenado a cadena perpetua, y Néstor Pavón, quien se declaró inocente y dijo que lo único que hizo fue prestarle el auto a Wagner, pero quien según Wagner también violó y fue quien ahorcó a Micaela García.

En un nuevo aniversario de aquél fatídico día, su mamá, Andrea Lescano volvió a dedicarle unas líneas.

También las amigas y compañeras de militancia
El gobernador Bordet también le dedicó unas palabras desde su cuenta de twitter y
Gustavo Bordet

@bordet
Es nuestra responsabilidad transformar el dolor que nos provocó lo que sucedió con #Micaela en la energía necesaria para que no haya más sufrimiento. Que su nombre y ejemplo sean la clave para construir un futuro de equidad y libertad, sin violencia. Es también nuestro compromiso
En la noche del viernes 1° de abril de 2016 estuvo en una fiesta en el boliche King, de Gualeguay. Salió de allí sola con destino al departamento donde vivía. A las 5.23 del sábado envió el último mensaje a su novio, que estaba en Concepción del Uruguay, donde vivía, para contarle que ya estaba regresando a su casa.

Hay grabaciones de cámaras de seguridad de casas y comercios que, puestas a disposición de la Justicia, permitieron reconstruir parte del recorrido de Micaela. Las filmaciones captaron también la imagen de un autor Renault 18 break, color verde claro, que se trasladaba muy lento y en forma sospechosa.

Los investigadores centraron la atención en ese auto y descubrieron que era de Sebastián Wagner, un hombre de 30 años que estuvo preso por dos violaciones, y que tenía salidas autorizadas desde enero de 2016. Wagner se convirtió así en el principal sospechoso y comenzó a ser buscado.

Con el correr de las horas quedó claro que estaba prófugo y se lanzó un pedido de captura internacional. Antes de abandonar Gualeguay, el sospechoso dejó su auto en un lavadero en el que trabajaba. Fuentes policiales y judiciales dijeron a LA NACION que, por algunas escuchas telefónicas, se pudo establecer que Wagner salió el domingo de Gualeguay, y que en la ruta nacional 12 abordó un camión que lo trasladó hasta la provincia de Buenos Aires.

Wagner fue detenido en Moreno, luego de que su madre y su hermano menor aparecieron en luna comisaría momentos después de que Wagner regresase a la vivienda. Cuando fue detenido, el sospechoso tenía 1117 pesos, suponiéndose que ese era todo su capital para continuar con el escape. Ya habían sido arrestados su padrastro y el dueño del lavadero en el que trabajaba como supuestos cómplices en su escape. Pero el camino para Wagner ya parecía cerrado antes que la comisión policial irrumpiese en la casilla de madera.

El 17 de octubre los jueces María Angélica Pivas, Roberto Cadenas y Darío Crespo condenaron a Wagner a prisión perpetua por «abuso sexual con acceso carnal y homicidio agravado por ser con alevosía, criminis causae y violencia de género». También sentenciaron a cinco años por «encubrimiento» a su ex patrón, Néstor Pavón. El hijo de la ex pareja de Wagner, Ignacio Otero, fue absuelto.