El próximo 25 de diciembre a las 21:00 se realizará el tradicional Pesebre Viviente en la Colina de la Virgen de Fátima, en avenida Costanera.

El mismo es organizado por un grupo laicos de las parroquias Nuestra Señora de Aránzazu y San Roque de Montpellier asesorados por el Padre Reynaldo Tentor.

A partir de San Francisco de Asís la recreación del Nacimiento de Jesús comenzó a formar parte de la fiesta de la  Navidad. En la ciudad de Victoria es una antigua y popular tradición la representación del Nacimiento del Salvador en los hogares, en los barrios, en las plazas, en las capillas, en los colegios, en los clubes, en el río y en nuestras bellas colinas.

En un comunicado que llegó a nuestra redacción, los organizadores manifiestan que la Navidad es la noche de la paz, del amor, de la vida, es la fiesta del encuentro, del encuentro con Jesús. Hace más de dos mil años nació Jesucristo entre los hombres y desde la pobreza de Belén, desde la sencillez de su vida, transformó la historia de los hombres, sin armas ni violencias, sin presiones, procurando y defendiendo la dignidad de toda persona humana y el amor incondicional de Dios por cada hombre, especialmente para  los pobres, los que lloran, los enfermos, los pecadores.

La Navidad es la Fiesta de la irrupción de Dios en la historia. Llega El que nos venía acompañando en nuestro caminar, por primera vez se metió en medio de nuestro andar. El, el todopoderoso, el creador, el trascendente, se transforma en el Dios con nosotros y de aquí en más este Dios será un Dios cercano, que no tenemos  que ir a buscarlo en la órbita de los astros sino que lo tenemos a nuestro lado.  La Navidad es la fiesta de la familia. La noche del pueblo y de las Naciones. La noche del brindis y del abrazo. Del perdón generoso y el olvido total. Es la noche de la Luz, la Luz de Dios entre los hombres.
Fuente: Paralelo32.com