La periferia del disco galáctico de la Vía Láctea y sistemas estelares más jóvenes que el nuestro pueden albergar vida extraterrestre. Esa es la conclusión de un estudio realizado por la Universidad Cornell (EE.UU.). Los autores han representado la Vía Láctea como un aislado conjunto de estrellas y exoplanetas mediante distintas simulaciones.

La modelación ha mostrado que la edad de las partículas de las estrellas capaces de mantener vida se estima en unos 3.000 millones de años. Estas estrellas se ubican a una distancia de 16 kilopársec (cada uno es de 3262 años luz) del centro galáctico mientras que menos de un 1% de las mismas se encuentra a entre 8 y 10 kilopársec de distancia. Para hacer una comparación, cabe señalar que la edad del Sol se estima en alrededor de 4.600 millones de años y su distancia hasta el centro galáctico equivale a 8,5 kilopársec.

Los astrónomos han estudiado las posibilidades de la aparición de condiciones favorables para la vida en el período máximo de 10.000 millones de años a una distancia de entre 10 y 15 kilopársec del centro galáctico. “Al fin y al cabo, es posible que no seamos los únicos ahí fuera, pero somos mayores que ellos”, concluyen los investigadores.