Celis y Cappa

El lider narco es defendido por Leopoldo Cappa y José Velázquez.

Será una semana cargada de testimoniales en el juicio que tiene al intendente Sergio Varisco como uno de los 33 imputados por delitos vinculados al narcotráfico. En total, se esperan 16 testimoniales repartidas entre lunes y martes en uno de los juicios más importantes de la historia de la provincia.

Varisco está acusado junto a su funcionaria Griselda Bordeira y el concejal Pablo Hernández por sus vínculos con la banda de narcotraficantes liderada por Daniel Tavi Celis, también imputado en la causa que unificó dos expedientes: narcomunicipio y narcoavioneta.

Narcoavioneta (Causa I)

La causa Narcoavioneta  comenzó con una nota que envió el jefe de la Delegación local de la Policía Federal, el comisario Víctor Chanenko al Juzgado Federal de Primera Instancia de Paraná. Allí Chanenko advertía que recibió un llamado anónimo diciendo que “las dos toneladas de droga que la Policía de Entre Ríos encontró en el barrio Paracao, las llevó ‘Cebolla’ Leguizamón del Barrio Antártida Argentina en el camión 148 de la Municipalidad de Paraná”.

Según la denuncia inicial, ese llamado abrió el camino a una investigación policial que derivó en intervenciones telefónicas y, posteriormente, en la interceptación de la avioneta cargada con marihuana en Colonia Avellaneda.

Esa interceptación fue el 18 de mayo de 2016 a las 16.45. Los agentes encontraron 317,150 kilos de marihuana acondicionada en 414 ladrillos. Además de la avioneta en un campo cargada con droga, los policías dieron con vehículos tipo Pick Up y un grupo de personas que estaban en el lugar. Dos hombres se fugaron y cuatro fueron detenidos.

La droga ya estaba almacenada en la camioneta Chevrolet S10 de cabina simple, debajo de una lona negra. La camioneta estaba al lado de la avioneta marca Cessna que había bajado cargada con ladrillos de marihuana, en el campo de los hermano Ghibaudo.

Consecuentemente, los días 7, 8 y 14 de octubre de ese año se hicieron 12 allanamientos en Paraná que dieron resultado positivo a la investigación. Encontraron 54.644 pesos; 3.857 dólares y 80 euros. También hallaron teléfonos celulares, cuadernos con anotaciones, armas de fuego y dos balanzas, cigarrillos de marihuana, y picadura de marihuana, entre otras cosas.

El período de la pesquisa se extendió entre el 16 de marzo de 2016 y el 28 de mayo de 2017, poco más de un año.

La hipótesis sostiene que Daniel y Miguel Celis organizaban el negocio. Las pistas de aterrizaje estaban en María Grande, Aldea Brasilera, Aldea Salto, Sauce de Luna, Bóvril, Alcaráz, Colonia Avellaneda y Villa Urquiza. Luego la droga era distribuida por distintos medios, entre ellos, camiones de recolección de basura del municipio, sin GPS, principalmente desde la Unidad Municipal 2.

En esta causa, Varisco, Hernández y Bordeira sólo son testigos.

Narcomunicipio (Causa II)

La investigación policial va desde septiembre de 2017 a mayo de 2018. La hipótesis es que el grupo comandado por “Tavi” Celis desde la cárcel, donde está alojado por un robo violento, comercializó de manera conjunta y organizada cocaína, asumiendo y ejerciendo diversas funciones. La organización almacenaba droga, financiaba y distribuía a distintas personas de Paraná, Concordia y Buenos Aires.

En esta causa, la hipótesis fiscal apunta a un supuesto acuerdo de Varisco con Celis, a partir del cual se le entregaba al grupo organizado para el narcotráfico unos 50.000 pesos mensuales a través de contratos municipales. Además, la investigación judicial pone de manifiesto la adquisición de grandes cantidades de cocaína por parte de Varisco, Bordeira y Hernández.

Los investigadores entienden que Celis manejaba todo desde la cárcel de Federal. Compraban la droga con fondos provenientes de ese acuerdo y también con fondos generados por la propia actividad ilícita. En el legajo de acusación puede leerse que el propio Celis encomendaba el transporte de remesas de cocaína a mujeres de mediana edad y al propio Wilber Figueroa Lagos (el peruano acusado de proveedor).

La acusación también sostiene que Luciana Lemos (ex pareja de Celis) recibía la droga, la distribuía y la cobraba. Además la mujer impartía órdenes que emanaba “Tavi” Celis a mandos inferiores. Periódicamente proveía de teléfonos y chips, y mantenía la comunicación entre “Tavi” Celis y Varisco, a través de Hernández y Bordeira.

El primer allanamiento en el marco de este expediente fue en mayo de 2018. Los policías llegaron a la casa de “Tavi” Celis, en calle Segundo Sombra de Paraná. Allí secuestraron 3,493 kilogramos de cocaína. Eran tres ladrillos envueltos en nylon negro y cinta de embalar, todo adentro de una bolsa de nylon transparente. La bolsa estaba adentro de una mochila negra que estaba en el piso, al lado de la silla donde estaba sentada Luciana Lemos, frente a una mesa redonda, en el quincho de la casa de Celis.

En el mismo operativo se secuestraron 122.610 pesos, chips de celulares, cuadernos con anotaciones referentes al comercio de estupefacientes, anotaciones en una hoja A4, 2 armas de fuego, municiones, balanza, 30 chips, una máquina de contar billetes, computadoras y tablets.

Después vinieron los múltiples allanamientos a oficinas del palacio municipal. Fueron en etapas distintas. Se secuestraron teléfonos y documentación.

En esta causa, además de Varisco, Hernández y Bordeira, en un principio se procesó al concejal Emanuel Gainza. Es que las anotaciones en un cuaderno y la cantidad de llamadas que le hizo Luciana Lemos (pero nunca atendió), se convirtieron en indicios que posteriormente fueron desechados, cuando el juez Leandro Ríos decidió sobreseer al edil.