Ante el surgimiento de reiteradas situaciones en las que mediante un llamado telefónico se pretende estafar a personas, haciéndoles creer que alguien de su entorno se encuentra privado de su libertad, comúnmente conocidos como SECUESTROS VIRTUALES, es necesario difundir detalles de esta modalidad delictiva a fin de evitar la zozobra que tal situación provoca en quienes reciben este tipo de llamados, como así también evitar perjuicios económicos a los ciudadanos, brindando a los posibles damnificados herramientas para saber cómo actuar ante una situación de éste tipo:
Esta modalidad delictiva se ha detectado en distintos lugares de la provincia, y viene ocurriendo en los últimos años en todo el país, y consiste en hacerle creer a una persona, telefónicamente y mediante un elaborado engaño, que un familiar ha sido secuestrado, para exigirle la entrega de alguna suma de dinero, objetos de valor, electrodomésticos o números de tarjetas de telefonía celular.
Generalmente se inicia el engaño con un llamado telefónico de un número desconocido y quien llama informa que alguna persona ha sufrido un accidente, pidiendo generalmente datos de su obra social, para luego dar otro número a fin de que se comuniquen con otra persona que les va a dar más detalles, el cual enfáticamente afirmará que se trata de un secuestro
En la mayoría de los casos, es la propia persona -que atiende la llamada- quien en realidad aporta detalles de los datos que los delincuentes afirman de manera genérica, sobre situaciones que pueden ser comunes, haciendo que la víctima crea que los supuestos secuestradores cuentan con datos ciertos y puntuales sobre la integración familiar y movimientos de la casa (por ej. que alguna persona se encuentra fuera de la vivienda en ese momento -cuando es común que durante el día los adultos trabajan o los niños están en la escuela, y los fines de semana de noche cuando los adolescentes salen-; que tienen dinero, joyas o relojes guardados en un placard o en una caja, etc.).
Si bien los delincuentes llaman a números telefónicos elegidos al azar, puede ocurrir que ya cuenten con alguna información de la persona que recibe la comunicación, llamándolo por su propio nombre o apellido. Hoy en día, puede resultar de fácil acceso por internet, conocer cuál es el número telefónico que corresponde a una dirección puntual y cuál es el nombre y apellido del titular de la línea, por lo que los delincuentes pueden contar con esa información de antemano, aún sin conocer a quienes están llamando.

¿QUÉ HACER?

– Ante una comunicación telefónica de ese tipo, lo esencial es guardar la calma.

– Es recomendable cortar la comunicación inmediatamente.

– Siempre es recomendable también, si es que se cuenta con la posibilidad de disponer de otra línea telefónica (un celular o un vecino), comunicarse con la supuesta víctima y luego contactarse con la seccional policial más cercana a su domicilio o al 101 comando radioeléctrico, aun cuando le exijan que apague todos los otros teléfonos.

– Nunca decir nombres o aportar otra información sobre el grupo familiar que pueda ser utilizada por los delincuentes, aunque el interlocutor afirme ser policía, ya que por lo general los delincuentes dicen que se encuentra accidentado o que capturaron a «un familiar», sin precisar la identidad.

– Siempre dé aviso a la policía antes de entregar efectos de valor.

– En algunos casos puede darse que la llamada se recibe mediante el sistema de cobro revertido, en tal caso verifique antes de aceptar la llamada si se trata de algún conocido.

– Si usted aportó a los delincuentes códigos de tarjetas telefónicas, no las tire aunque así se lo exijan. Entréguelas a la policía, ya que de esa manera se puede rastrear al autor o cómplices del delito.

– Instruir a todas las personas de la casa que puedan atender el teléfono, fundamentalmente a los niños, personas mayores y al personal doméstico, acerca de no aportar datos a desconocidos sobre los miembros de la familia o el movimiento del hogar.

Conocer la modalidad delictiva y divulgar ese conocimiento en su entorno familiar, les permitirá estar alertados ante una posible llamada y evitar ser víctimas del engaño.
Las mismas recomendaciones son válidas para las llamadas telefónicas de alguna empresa de telefonía, aseguradora, tarjetas de crédito, empresa de servicios, etc. que exigen datos personales de los titulares de la casa, números de clientes, de DNI.etc. Se recomienda no dar ningún tipo de datos, no suscribirse a ninguna promoción y no contratar servicios por este medio, si tiene algún interés en hacerlo es preferible que sea Ud. quien llame a la empresa. Prevenir es primordial para no vernos envueltos en situaciones de vulnerabilidad.