Matias Circeri de 37 años, con las manos manchadas, se presento a las 18,30 en la guardia de Jefatura de Policía de Victoria, diciendo que había asesinado a su madre.

Su apariencia era la de siempre, la de alguien con sus facultades mentales alteradas.
Una patrulla policial fue hasta el domicilio de calle Suipacha y Vicente López y se encontraron con un macabro hecho producido en la cama donde descansaba Juana Mercedes Charpentier, de 60 años, nacida el 7 de febrero de 1954.
La División Criminalística cuando llego, encontro a la dueña de casa con un hilo de vida, la trasladaron al Hospital, donde a las 20 hs, el medico firmo su fallecimiento.
Hace 17 años había pasado lo mismo con su abuelo materno, entonces estuvo un año detenido hasta que lo declararon inimputable, fue entonces que paso temporadas en hospitales psiquiátricos en Paraná y Federal, pero nunca se lo vio recuperado.
Según los primeros datos, hace 15 días el mismo pedía internarse en algún lugar, tenia alteraciones morbosas que provocaban estos ataques sicóticos. Su madre estaba en la cama, con una enfermedad terminal, aprovechando que el compañero de su progenitora salio de compras a un negocio del barrio, la ataco sin piedad.
Por estas horas Matías esta con rigurosa guardia en el Hospital Fermín Salaberry, mientras continúan las acciones judiciales a cargo del Fiscal de turno Doctor Gamal Taleb.