«Me voy por un tiempo, no me busquen porque no me van a encontrar». Esas fueron las palabras que escribió Ludmila Di Venuta, de 15 años, en una carta que dejó en su domicilio, en el barrio De Vicenzo Chico, de Tortuguitas, el miércoles último, antes de perderse todo contacto con ella. Desde ese instante, su paradero es una completa intriga.

La joven asistió ese día al coelgio Fátima, de Tortuguitas y las cámaras de seguridad la ubican a las 13:30 de ese día en la estación de trenes Manuel Alberti, sola, y pese al intenso monitoreo, no se pudo determinar qué pasó después con ella.
Según expresó Natalia, su hermana, se habría fugado con un hombre llamado Rodolfo, «según cuentan sus amigas, pero ninguna lo conoce ni saben dónde vive, jamás lo vieron». la joven aseguró que «simplemente pudieron dar ese nombre por las conversaciones que habían tenido con mi hermana».

La última conversación que la familia tuvo con Ludmila fue el miércoles durante la tarde. «Cerca de las 19.30, respondió un mensaje de texto y escribió que estaba bien y que no la buscáramos. Desde ese momento, apagó el celular», detalló.