Según se pudo saber la historia hubiese sido otra si un empleado municipal no hubiera visto que la caldera no funcionaba como tenía que hacerlo.

Sucedió este viernes en horas de la tarde, aproximadamente a las 19:30, cuando un empleado municipal dio una recorrida y observó que algo andaba mal.

“Estamos investigando, fue llamativo lo que sucedió, un empleado observó que el termostato estaba a 200, siendo que esté está regulado, de no haber llegado a tiempo, la temperatura se hubiera disparado, con consecuencias severas” comentó el encargado de la plata asfáltica.

“Seguro una mano negra anduvo, no paso nada gracias a dios y esperemos que no pase nada más”, concluyó el encargado.