El Pincha empezó ganando por un cabezazo de Correa. En el segundo tiempo, cuando la hinchada millonaria ya cantaba contra el DT Demichelis, llegó el empate por un gol en contra. Cuando parecía que el partido se iba al alargue, Alliendro metió un zapatazo de afuera y River gritó campeón

River derrotó por 2 a 1 a Estudiantes de La Plata este miércoles por la noche en Córdoba, y se quedó con la Supercopa Argentina. A esta final accedieron River Plate, ganador del Trofeo de Campeones 2023, y Estudiantes de La Plata, vigente campeón de la Copa Argentina. 

Estudiantes pegó primero y muy temprano en el partido. A los tres minutos, Correa metió un cabezazo letal en el área chica y dejó sin asunto a Armani.

River no encontraba su juego en la primera etapa y los hinchas empezaron a cantar contra el técnico Martín Demichelis, en un relación que ya viene a los tumbos desde hace tiempo.

Pero en el segundo tiempo River salió con otra actitud y avasalló al Pincha. A los 34 minutos, cuando los dirigidos por Eduardo Domínguez empezaban a encontrar espacios para la contra, Solari desbordó por derecha y quiso lanzar un centro bajo, pero la pelota rebotó en el pide del defensor pincharrata Romero que cerraba y se le metió al arquero Mansilla, que hasta ese momento parecía imbatible.

La final se iba al alrgue, pero River seguía intentando. Y tuvo su premio. Rodrigo Aliendro, el jugador por el que había apostado Demichelis para refrescar el mediocampo y la ofensiva de su equipo, tomó una pelota desde fuera del área y la clavó en el ángulo del arquero del Pincha.

No hubo tiempo para mucho más. Solo para el festejo de los jugadores riverplatenses y el desahogo del entrenador Demichelis, al que se lo vio con lágrimas en los ojos en el final.

En la previa, todas las cámaras apuntaron al saludo entre Enzo Pérez y Demichelis, que fue muy frio por cierto.