El accidente fue protagonizado por un automóvil Nissan Sentra, dominio JWF 225, guiado por Emilio Eduardo Varela (76), quien viajaba en compañía de María Arreseygor (66) –ambos de Victoria– en sentido Este-Oeste. 

Según una testigo, que habló en la radio FM Riel de Basavilbaso, el vehículo «mordió» la banquina, «atravesó la ruta, salió de ella cayendo por un terraplén» y pasó «volando» a pocos metros de una columna del tendido eléctrico.

Tras romper el tejido de un alambrado, el auto dio tres vueltas en el aire hasta quedar «con las cuatro ruedas para arriba» a unos 30 metros, en medio de una plantación de soja. «Creíamos que los ocupantes se habían matado», dijo la mujer.

El recorrido descontrolado que hizo el auto fue de no menos de 30 metros. La testigo contó que con su patrón fueron «corriendo» hasta el lugar, pusieron al vehículo sobre sus ruedas y ayudaron a salir a los ocupantes. «Fue un milagro que no les pasara nada grave», aseguró la señora, quien que destacó que a los pocos minutos que llamaron llegó la Policía, una ambulancia del hospital y los bomberos.

«La señora estaba un poco mareada, pero gracias a Dios sin lesiones graves, a mi entender se salvaron por tener el cinturón de seguridad puesto», resumió.