Wally, el chico con síndrome de Cantú que vive en Rosario, viajó con su familia a la ciudad de San Luis en Estados Unidos. Allí se estudió otra vez el caso de este niño de 4 años que recibirá una medicación especial para contrarrestar los efectos de esta enfermedad. El Sanatorio de Niños de la ciudad del sur provincial estará implicado en el tratamiento junto a los especialistas estadounidenses.

Walter Coen sufre de síndrome de Cantú. Una enfermedad que afecta a un porcentaje muy bajo de gente en el mundo. Wally, como todo el mundo lo conoce, y su familia estuvieron en San Luis, Misuri (Estados Unidos). Esa ciudad es sede de los centros médicos de estudio más importantes del planeta sobre esta afección. Ellos son la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington en San Luis y el hospital de niños local. Allí pasaron unos días y asistieron a simposios sobre la temática.

El viaje en avión de ida no fue fácil porque Walter requirió de oxígeno. El niño de 4 años arrastraba un cuadro viral y eso obligó a la familia a hacer las paradas necesarias entre Rosario (lugar de residencia) y aquella ciudad estadounidense. La jornada del miércoles 19 de junio fue de exposiciones sobre los avances en el estudio de este síndrome. El jueves 20 y el viernes 21 fue el turno de todos los exámenes clínicos, estudios y entrevistas personales. Tras la revisación médica se decidió que Wally reciba glibenclamida. “Es la misma droga con la que se trata y se cura la diabetes neonatal y la diabetes tipo 1.

El tratamiento es de por vida”, comentó a Mirador Provincial la mama, Ingrid Heidenreich desde Estados Unidos. Tras las reuniones se concluyó que se conformará un equipo de trabajo entre médicos de Rosario y de San Luis para que desde EE. UU. los vayan guiando con respecto a las dosis, los controles y demás aspectos del tratamiento. “Se deberían ver mejorías en Wally ya a las pocas semanas”, agregó Ingrid. La mamá afirmó además que hay un caso exitoso en Australia con esta terapia y que ese precedente será una guía.

Las evaluaciones van a ser constantes ya que es un tratamiento vitalicio. Los médicos estadounidenses vendrían a ver al chico a Argentina en marzo o abril de 2020. Posteriormente, en junio de 2020, la familia Coen deberá volver a San Luis para más revisaciones. “Él (Wally) es el único paciente de los que forman parte del protocolo que va a tener la medicación”, dijo Ingrid. En un mensaje compartido por WhatsApp con familiares y amigos, Heidenreich comentó durante su estadía en Estados Unidos de América: “Podemos hacer la diferencia, nosotros marcaremos la diferencia, Wally lo hará. Realmente recibí una dosis fuerte de realidad del futuro complicado que le espera a Wally si no logramos que él también sea un caso exitoso del uso de la glibenclamida”. “Hay que trabajar mucho. Es un desafío enorme hacerlo allá y a la par entre ambos países pero todos estamos dispuestos”, agregó. “Nos toca armar el equipo médico entre ambas instituciones, la Washu (Universidad de Washington) y el Sanatorio de Niños. Este equipo estará guiado y asesorado por la Washu. Wally será por ahora el único paciente de todos los que forman este protocolo que recibirá la medicación y seguirá siendo investigado. Esto implica un antes y un después para todos. Y nos permite desde Rosario abrirnos al mundo”.

Ingrid enfatizó también en estos mensajes el carácter luchador de su hijo frente a esta realidad tan adversa: “Gracias a Wally, a este campeón de la vida que nos invita a seguirlo, a contagiarnos de su energía, de sus ganas de vivir, y por sobre todo de ayudar a otros, de contarles una vez más que se puede, que hay herramientas, que nuestra Argentina es enorme”.

Fuente: Mirador Provincial