Francisco pidió una Iglesia "humilde" en su primera misa de 2018
En su primer homilía del año, dedicada a refugiados e inmigrantes y realizada estamañana en la Basílica San Pedro, Francisco pidió a los cristianos a «comenzar desde el centro».
En este mensaje, que el Vaticano ya difundió con antelación el pasado noviembre, el Papa se muestra contrario a quienes incitan al miedo a los inmigrantes a veces con fines políticos, porque crean sólo racismo y violencia.
«Los que fomentan el miedo hacia los inmigrantes, en ocasiones con fines políticos, en lugar de construir la paz siembran violencia, discriminación racial y xenofobia, que son fuente de gran preocupación para quienes se toman en serio la protección de cada ser humano», escribió el pontífice.
Su mensaje de la Jornada de la Paz, que este año tiene el título de «Inmigrantes y refugiados: hombres y mujeres que buscan la paz», Jorge Bergoglio advirtió que «las migraciones globales seguirán marcando nuestro futuro».
Hoy en su homilía en la basílica de San Pedro, dedicada a la Virgen María, Francisco pidió a los fieles que dejen «los fardos del pasado» y empiecen «de nuevo desde lo que importa», e insistió en que Dios quiere que la Iglesia sea como la Virgen, «madre tierna».
La celebración eucarística de hoy en el Vaticano estuvo dedicada a la «solemnidad de María Santísima Madre de Dios» y el Papa afirmó que la devoción a María «no es una cortesía espiritual, es una exigencia de la vida cristiana».
«El don de la Madre, el don de toda madre y de toda mujer es muy valioso para la Iglesia, que es madre y mujer», agregó.
«Y mientras el hombre frecuentemente abstrae, afirma e impone ideas; la mujer, la madre, sabe custodiar, unir en el corazón, vivificar», concluyó.