El Peque perdió ante el español Zapata Miralles por los octavos de final del torneo de Buenos Aires y se lamentó por la mala racha que arrastra desde el año pasado.

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Diego Schwartzman no tuvo un buen 2022 y su arranque en el 2023 tampoco fue una mejora. Al igual que todos los años, el Peque llegó al Argentina Open como uno de los favoritos al título y, de hecho, defendía los puntos de haber sido finalista en la última edición. Sin embargo, cayó sin atenuantes en octavos de final y reconoció que está en un muy mal momento.

En el partido central de la noche de jueves, Schwartzman perdió ante Bernabé Zapata Miralles por 6-1 y 6-3. El español, número 74 del ranking mundial, profundizó la mala racha del Peque, que dejó de ser el mejor argentino en el circuito tras caer eliminado en el Córdoba Open y ser superado en la clasificación por Francisco Cerúndolo.

Luego de la derrota, Schwartzman habló de su momento: «Es difícil encontrarle una explicación al partido y al momento. El nivel es muy bajo, no logro ser competitivo ni con la ayuda de la gente ni con algún error del rival. Es la realidad, hoy el nivel está muy bajo y me toca perder partidos que antes ganaba. Me está costando encontrarle alguna explicación, de ahí sale la incertidumbre con la que estoy jugando», expresó.

Claro, ni los cánticos de la gente que copó el Lawn Tennis de Buenos Aires logró levantarlo anímicamente durante el partido. Tras tres años siendo el argentino mejor ubicado en el ranking mundial, el Peque está en una de sus peores rachas: «El día a día lo sigo haciendo de la misma manera, no entiendo el porqué, pero no está saliendo nada de lo que antes me salía dentro de la cancha. Creo que ahí está la explicación, no hay que darle mucha vuelta. Mi nivel está muy por debajo de lo que puedo dar. Si jugás en este nivel, perdés. Lamentablemente estoy perdiendo con scores que profundizan las malas sensaciones y es difícil. Hoy estoy parado sobre una nube que no sé para dónde va a ir».

Por último, Schwartzman cerró: «Ni yo ni mi equipo le encontramos la explicación, de ahí parte la incertidumbre. Los entrenamientos no serán los mejores pero están lejos del nivel que muestro dentro de la cancha. Perdí varios puestos en el ranking porque es la gira en la que siempre gano. Quedan dos torneos más que la verdad no sé qué me conviene, si ir y competir o frenar unos días. Ya no sé. Estoy en una incertidumbre complicada a la hora de competir que me está costando».