Diez tecnologías que marcarán la agenda de 2018
La inteligencia artificial, el Internet de las Cosas, el avance del ‘blockchain’ y la interacción por voz son algunas de las claves del nuevo año.
Si hay una tendencia que va a marcar la agenda tecnológica durante 2018, ésta será sin duda la inteligencia artificial. Tras las revoluciones del PC, Internet y los dispositivos móviles, estamos a las puertas de una cuarta ola de innovación marcada por la explosión de la inteligencia artificial. Si bien desde mediados del siglo pasado se investiga cómo dotar de inteligencia a las cosas, es ahora cuando realmente estamos empezando a vislumbrar las posibilidades de una tecnología que ya se ha convertido en un pilar estratégico para gigantes tecnológicos como Google, Amazon, Apple, Microsoft, Facebook o IBM. En poco tiempo, la inteligencia artificial será omnipresente en aplicaciones y servicios. «Será la tecnología más disruptiva en la próxima década debido a la mayor capacidad de cómputo, los avances en las redes neuronales y la cantidad casi ilimitada de datos», dicen en la consultora Gartner.
La inteligencia artificial es la llave del mundo hiperconectado que se ha bautizado como Internet de las Cosas (IoT). Según Gartner, en la actualidad ya hay del orden de 8.400 millones de objetos conectados, cifra que alcanzará los 20.400 millones en 2020. Por ejemplo, la sensorización promete un gran salto productivo en la industria, que también empieza a beneficiarse de otros avances como la fabricación aditiva o el empleo del blockchain para, por ejemplo, la trazabilidad de las piezas. El blockchain, que permite realizar transacciones de cualquier tipo de forma fiable y segura, sin necesidad de que haya un intermediario, también seguirá siendo explorado por el sector financiero.
La inteligencia artificial también se podrá beneficiar en su desarrollo de los avancesen la computación cuántica, que permitirá desarrollar ordenadores extremadamente rápidos capaces de realizar cálculos, simulaciones y análisis que ahora no son viables.
‘MACHINE LEARNING’
Dentro de la inteligencia artificial, uno de los campos prioritarios es lo que se conoce como machine learning, es decir, el desarrollo de algoritmos que aprenden de la experiencia. El machine learning es la base, por ejemplo, de los chatbots, programas de software basados en inteligencia artificial capaces de emular a las personas para mantener conversaciones con los humanos. Gartner pronostica que, en 2020, estos chatbots se emplearán en el 85% de las interacciones de los servicios de atención al cliente.
La inteligencia artificial también está detrás de los asistentes virtuales, un área estratégica para todos los gigantes de Internet, que compiten con asistentes como Siri (Apple), Alexa (Amazon), Google Assistant (Google), Cortana (Microsoft) o Bixby (Samsung). La posibilidad de interactuar con la voz con estos asistentes plantea una pregunta interesante. ¿Seguirá siendo en el futuro la pantalla táctil la principal interfaz de los dispositivos tecnológicos o será más habitual interactuar mediante la voz?
REALIDAD VIRTUAL Y AUMENTADA
Dentro de estas nuevas formas de interactuar con la tecnología también ocupan un lugar destacado los avances que brindan experiencias inmersivas, como la realidad virtual y la aumentada. Las expectativas son altas y queda aún mucho camino por recorrer, pero la industria tecnológica está redoblando su apuesta en este ámbito. Si bien la realidad virtual se ha explorado más desde un punto de vista lúdico, la realidad aumentada promete aplicaciones interesantes en el ámbito profesional. IDC pronostica que el gasto mundial en estas tecnologías prácticamente se duplicará el año que viene hasta los 17.800 millones de dólares.
Otro tema de actualidad será la ciberseguridad, una prioridad en la agenda de las compañías, más aún desde el ataque Wannacry.
En consumo, los fabricantes mantendrán su apuesta por convertir a sus dispositivos en terminales aún más inteligentes gracias a la inteligencia artificial. En 2017Huawei ha presentado el primer procesador neuronal y todo apunta a que ésta será la tendencia que marcará al resto de compañías. Además, se verán más avances en biometría, como el lector de huella dactilar en cualquier parte de la pantalla o importantes mejoras en el reconocimiento facial.