Francos Giaquinto y Marcos Pereyra tienen en la calle su segundo trabajo discográfico denominado Huellas. Según Franco fue algo inusual este CD, ya que demoró un poco más de la cuenta poder finalizarlo, pero afortunadamente, por varios compromisos contraídos se fue cocinando a fuego lento. Dice Marcos que para un músico es fundamental grabar un disco no sólo por lo que representa en lo personal sino porque es la carta de presentación, en tantos lugares que somos poco conocidos.

Pasaron 4 años del primer CD del dúo y era, según ellos, un muy buen momento para que saliera el segundo. Giaquinto apunta a que como lo de ellos no es una música comercial y les reditúa en forma importante las actuaciones en eventos y festivales, el trabajo discográfico es fundamental a la hora de que se conozca lo que producen. “Estamos dichosos, lo estamos disfrutando mucho y esperemos que se repita lo de nuestro primer CD, que se agotaron las 500 copias que realizamos, la misma cantidad que realizamos con Huellas, el nombre del actual. Son 15 temas y como es bien entrerriano predominan las chamarritas. Franco especifica que “hay una selección de éstas muy conocidas como ‘Cruzando el Arroyo Malo’ que   nombra a Montoya, “un pago que me toca muy de cerca porque ahí nacieron mis abuelos”.

Ente otras composiciones, en el trabajo se destaca el clásico Juan del Gualeyan, Coplas felicianeras, y El chamarritero, de Antonio Tarrago Ross. En algunas de las canciones nos compaña Chazarreta, un excelente acordeonista diamantino que compartió cartel con Las Voces de Montiel. Completan el trabajo algunas de Tarragó y otras de Marcos y de Franco. Por cierto, un trabajo bien variado.