Los Jardines Maternales son una solución para las personas que tienen que trabajar o estudiar y en la mayoría de los casos no cuentan con medios para pagar un empleada, a tal efecto consultamos cómo están trabajando en ese sentido a los responsables del área específica del municipio.

Actualmente están funcionando 8, de los cuales 7 tienen doble turno que atienden a más de 400 chicos, explicó Juan Muñoz. Reciben chicos desde 45 días de vida a 3 años, los primeros que usan pañales son atendidos por las auxiliares que los cambian y le dan mamadera, cuando hay medicación lo tiene que suministrar el padre o la madre personalmente. Los más independientes  se les  da el desayuno o merienda según el horario y al mediodía un almuerzo con una dieta variada indicada por la nutricionista. Mediante el sistema de licitación se realizan las compras cada dos meses. Hasta el momento no han tenido problemas, pero hacen un seguimiento permanente.

Haciendo un poco de historia, Muñoz recordó que cuando se hicieron cargo las instalaciones e infraestructura estaban en pésimas condiciones. De a poco fueron reparando los inmuebles, pintando y dejando un ambiente confortable en cada uno de los Jardines. “Antes eran atendidos por los tenedores de planes Jefas y Jefes de Hogar, actualmente hay docentes y auxiliares en total trabajan 60 personas”. Además cuando hay requerimientos puntuales de remedios o pasajes por determinadas cuestiones de salud de los chicos, se gestionan los mismos desde la comuna.

“Esto representa una solución para la gente que trabaja, porque deja a los chicos o bebés que son cuidados y a su vez les sirve para socializarse, por la estimulación que generan todas las acciones que se llevan a cabo”, explicó.

También se trabaja en conjunto con la Dirección Departamental de Educación. El año pasado inauguraron el Jardín nocturno para los padres que estudian en la Escuela N° 43, que permite que mientras adquieren conocimientos sus hijos están atendidos.

Se está avanzando también en organizar otro para que asistan alrededor de 30 chicos de estudiantes del BAPA. El proyecto podría concretarse este año y en base a lo que han planificado están buscando un lugar donde funcionar, para hacerlo en horario nocturno coincidente con el del mencionado instituto.

La otra responsable es la Lic. en Trabajo Social, Carolina Reggiardo, quien comentó que para todo el tema educativo hay docentes que dependen del Consejo General de Educación, auxiliares y cocineras son aportadas por el  municipio. Por el hecho de tratarse de chicos de tan corta edad (desde 45 días hasta 3 años), tiene mucha participación la familia, hacen reuniones a principio del año de tipo informativa y durante el periodo escolar se realizan talleres en el que participan los padres. Según Reggiardo, esta es una práctica que ha dado muy buenos resultados para lograr la integración entre ellos, por las acciones que llevan a cabo. “Son chicos que recién comienzan a establecer vínculos y se socializan, lo que resulta muy importante” sostuvo la profesional.

“Es muy gratificante este trabajo”, notándose la participación activa de los chicos. En cuanto a acciones concretas programan las fiestas patrias y el día de la primavera. Para este último comienzan a trabajar dos meses antes con insumos para hacer determinadas cosas alegóricas, y se convive en un ambiente muy especial que los chicos disfrutan en gran forma.