Sergio Massa explicó cómo sería la moneda digital argentina
En ese marco, señaló que el proyecto es complementario de la propuesta de blanqueo que ya está en el Congreso, que a su vez se relaciona con “el acuerdo firmado con Estados Unidos que otorga acceso a toda la información de aquellos con cuentas en el país del norte”.
De acuerdo con las declaraciones de Massa, la idea de la moneda digital apunta también a combatir la evasión tributaria al mejorar la trazabilidad de los fondos.
“Argentina tiene más del 40% de la economía en negro. Si no resolvemos eso estamos frente a un problema y la economía digitalizada también te rompe los bolsones de corrupción porque es el límite más franco y más duro que le podés poner”, señaló el titular del Palacio de Hacienda.
La propuesta de creación de una moneda digital fue anticipada de manera general anoche por Massa en el marco del debate presidencial entre candidatos que se realizó en la Universidad Nacional de Santiago del Estero.
Allí, durante su intervención adelantó que la divisa virtual “ofrecerá una reducción impositiva para quienes la utilicen en sus operaciones económicas, como una forma de promover la formalidad en las transacciones”.
Detalles de la moneda digital argentina
Este lunes, en la entrevista con C5N, brindó algunos detalles más al precisar que la iniciativa contemplará una reducción del 30% en lo que paga de impuestos cada ciudadano siempre y cuando vuelque todos sus ingresos en -y los utilice a través de- billeteras digitales.
“Vamos a poner en marcha la moneda digital argentina. Así como tus hijos plantean en su economía de plataformas la posibilidad de comerciar con el celular o la tarjeta, lo vamos a hacer de manera global para toda la Argentina”, señaló el domingo Massa durante el debate en el que planteó sus propuestas.
Si bien aún no se conocen los pormenores del proyecto de ley sobre el que trabaja el equipo económico, hay antecedentes a nivel mundial que permiten vislumbrar hacia dónde se podría dirigir la iniciativa.
En los últimos años, a raíz del auge de las criptomonedas (que operan en forma descentralizada), los bancos centrales de distintos países comenzaron a evaluar la emisión de formas digitales de dinero para pagos minoristas denominadas dinero digital de bancos centrales (CBDC por sus siglas en inglés).
De acuerdo con una investigación del economista indio Eswar Prasad los motivos de la creación de las CBDC incluyen “desde ampliar la inclusión financiera (al dar acceso rápido a un sistema de pago digital gratuito incluso a quienes carecen de una cuenta bancaria) hasta aumentar la eficiencia y la estabilidad de los sistemas de pagos con la creación de una opción pública de pago como salvaguardia (función que actualmente desempeña el efectivo)”.
Otros beneficios podrían ser obstaculizar a las actividades ilegales como venta de drogas, lavado de dinero y financiamiento del terrorismo que se apoyan en operaciones anónimas en efectivo.
También pueden contribuir al aumento de la formalización de la actividad económica, dificultando así la evasión de impuestos.
Asimismo, las pequeñas empresas podrían beneficiarse de costos de transacción más bajos.
Qué es una CBDC
En la misma línea, según un documento de trabajo publicado por el Banco Central de la República Argentina (BCRA) el año pasado, el CBDC es una opción que el desarrollo de la tecnología blockchain abrió a las autoridades monetarias para emitir sus propios pasivos digitales, de forma que estén accesibles al público general.
De esta forma, los bancos centrales pueden reducir los costos de intermediación del sistema financiero tradicional y tener un vínculo directo con los usuarios finales, a quienes podrían identificar individualmente a través de la tecnología asociada.
«Una CBDC tendría el potencial de asegurar un sistema de pagos eficiente, competitivo y más resiliente y también el de mejorar la eficacia y los márgenes de maniobra de la política monetaria», señaló el documento firmado por el economista y gerente principal de investigaciones del BCRA, Sebastian Katz.
«Se admite, al mismo tiempo, que su introducción podría desplazar a los depósitos bancarios y generar riesgos no despreciables a la estabilidad financiera», agregó el documento.
La idea de explorar una moneda digital ya había sido abierta el año pasado, luego de que el presidente Alberto Fernández modificara el estatuto de Casa de la Moneda, a través del decreto 207/22, que abrió la puerta para emisión de una CBDC.
El decreto otorgó al organismo monetario la facultad de «realizar actividades relacionadas directa o indirectamente con la evolución de las respectivas tecnologías»; de «desarrollar, gestionar y operar software para emitir, renovar, revocar y administrar validaciones y certificaciones digitales»; y de «efectuar la administración de servicios transaccionales, como ejecución de pagos o cobranzas por cuenta y orden de terceros vía dispositivos electrónicos».