El secretario de Asuntos Penitenciarios, Walter Gálvez, señaló que el conflicto en la cárcel de la ciudad de Santa Fe logró solucionarse en las primeras horas de hoy. Allí perdieron la vida dos detenidos por peleas entre reclusos y esta mañana un tercero. Hubo serios destrozos.

El secretario de Asuntos Penitenciarios de la provincia, Walter Gálvez, confirmó que son cuatro los reclusos muertos en los motines registrados en las últimas horas, uno en la cárcel de Coronda y dos en el penal de Las Flores, además de dos heridos de gravedad.

Los motines se registraron durante la tarde de ayer y se iniciaron «de manera simultánea», según indicó el funcionario provincial, quien no descartó que haya más víctimas fatales entre los detenidos. Los presos reclamaban mayores medidas de prevención por el coronavirus y situaciones de hacinamiento.

En declaraciones al programa El primero de la mañana, de LT8, Gálvez detalló que «en Coronda el saldo es de un interno fallecido por una gresca entre internos y dos heridos del Servicio Penitenciario que se lesionaron al subir a los techos. En el penal de Las Flores hasta el momento, porque el motín se recuperó a la madrugada y ahora se está haciendo el recuento de detenidos, hay dos presos muertos por grescas. No hay ninguna baja entre los efectivos del Servicio Penitenciario y de la Tropa de Operaciones Especiales. Hay dos heridos de gravedad entre los reclusos».

Minutos más tarde, el secretario de Justicia, Gabriel Somaglia, confirmó por esa emisora que uno de los heridos de gravedad había fallecido, por lo que el número de víctimas fatales debido a los motines se elevó a cuatro, uno en Coronda y tres en Las Flores.

Acerca del motivo del comienzo de las protestas, Gálvez comentó que «arrancaron en forma simultánea en Las Flores y Coronda, porque en Piñero no hubo motines, y creo que un poco se debe a la confusión que generó que a la suspensión de las visitas podía sumarse la suspensión de la entrega de paquetes y depósito de dinero a los internos, cosa que no era así. Por otra parte la situación que empezó a generarse a partir de las prisiones domiciliarias y un poco aprovechamiento de la situación».

«En Coronda se pudo hablar con los delegados -amplió Gálvez- e inmediatamente gran parte depuso su actitud, aunque con la angustia de que se destrozó por completo la sastrería donde estaban confeccionando miles de barbijos para la emergencia sanitaria».

Sin embargo, destacó que en penal de Las Flores «fue peor porque ganaron la farmacia y con el consumo de sustancias y el alcohol que había en el lugar se tornó imposible cualquier tipo de negociación y hubo que intervenir», al tiempo que aclaró que «no hubo ninguna baja en la operación misma de intervención, los fallecidos estaban desde antes».

Consultado sobre a qué atribuía la coordinación del inicio de los motines, Galvéz explicó: «No lo puedo atribuir a un solo motivo, fueron varias cosas que se fueron juntando y tomando presión. Pero no dejan de ser llamativos los escritos que presentaron los reclusos. Al leerlos, con números de artículo, es llamativo que los haga un interno. Hay un formato que resulta un poco sospechoso».

Sobre si el fondo de la cuestión tenía sustento en la superpoblación de reclusos en ambos penales, el secretario indicó que «eso no tiene sustento y lo que no tiene sustento tampoco en este tiempo de emergencia es la destrucción masiva de instalaciones que son en beneficio de los mismos internos. Destrozaron teléfonos públicos de algunos pabellones, los ventiladores, las computadoras, los espacios donde declaran, son cosas poco entendibles».

 

Acerca de si ya había una cuantificación de los daños señaló: «En Las Flores no porque se recuperó hacia las 3.30 de esta madrugada. No descartamos que haya más fallecidos y los daños son importantes, casi totales. Además se quemó gran parte de la instalación eléctrica».